Los ciudadanos son imbéciles (según los políticos y Niño Becerra)

Uno de los errores monstruosos que cometen los políticos independientemente de su color es considerar que la ciudadanía está compuesta de imbéciles. Así de tajante se muestra el economista Niño Becerra, mientras analiza las últimas declaraciones de los políticos españoles, recogido por el analista de Bolsa.com Lone.

– Alemania necesita ingenieros. Me dice un lector que según datos de la Asociación de Ingenieros Alemanes, a 12 de Marzo habían en Alemania 18.850 ingenieros en paro. Alemania necesita ingenieros, OK, pero, ¿qué ingenieros son los que necesita Alemania?.

– Uno de los errores monstruosos que cometen los políticos independientemente de su color es considerar que la ciudadanía está compuesta de imbéciles. Esto lo digo por lo que el pasado Viernes 11 dijo el Sr. Ministro de Economía cuando le preguntaron sobre los cocos: “Esto no cuesta un euro a los contribuyentes españoles. No hay coste. Hay una disponibilidad de recursos que se pagan a un tipo de interés muy superior a los que fija el mercado, el doble de lo que le cuesta al Tesoro colocar deuda a esos plazos, y que se reembolsan al Estado”, unas esas ayudas públicas que, según él, no lo son. (El País 12.05.2012, Pág. 23). Al Sr. Ministro se le podría decir: eso será si los cocos son devueltos a vencimiento con su correspondiente interés (¡¡¡¡10%!!!!), pero, ¿qué pasará si han de convertirse en acciones de un muerto que suspende pagos (¿por qué pondrían el nombre de ‘concurso de acreedores’?).

– Si las entidades financieras del reino han de provisionar todo lo que hasta hora el Gobierno les ha dicho que ha de provisionar (pienso que será más: hay 1,39 B € en créditos dando vueltas por ahí y el ladrillo sólo supone 0,34 B), se plantea una duda metafísica. El objetivo último de todas estas reformas es que se recupere la confianza en el sistema financiero español y que los bancos vuelvan a dar créditos, pero si esos bancos han de provisionar, y provisionar, y provisionar debido a que cada vez hay más dudas sobre la calidad de los prestatarios a los que se les concedieron créditos y más créditos, ¿a quién van a prestar y con qué fondos van a prestar?; y tan importante como eso: ¿cómo van a poder comprar la deuda pública que el Estado debe constantemente vender? (Por cierto, eso del ‘crédito normal’ pienso que habría que matizarlo. Es crédito no-problemático con unos parámetros determinados: una tasa de paro fija, unas perspectivas de negocio determinadas para las empresas, un nivel de recaudación fiscal dado, … pero, ¿qué pasa si esos parámetros empeoran?, ¿y si empeoran mucho?. De ahí la pregunta: ¿qué volumen de esos créditos dejará de ser ‘normal’ y pasará a ser ‘anormal’?).

– El ‘Informe de Primavera’ de la Comisión Europea (peor que el anterior y mejor que el siguiente, ya verán). Para España terrible: sin crecimiento… Seguir leyendo.


Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.