Cuándo es rentable pagar a los becarios

Nos encontramos actualmente con un panorama laboral que, aunque tiene perspectivas positivas, por el momento se encuentra muy parado. Son muchas las empresas que están pasando estragos económicos, que no consiguen cuadrar sus cuentas y que por tanto necesitan ajustar su presupuesto por algún lado. Para la gran mayoría de las empresas, el mayor de sus gastos se realiza en concepto de salario a empleados, por esta razón, a la hora de recortar este es uno de los gastos que primero se reducen.

Han sucedido dos cosas a la vez: El descenso de los recursos de las empresas y la puesta en marcha del plan Bolonia, que en muchos casos obliga a sus alumnos a realizar unas prácticas en empresa para poder completar sus estudios. Aunque unas pocas universidades lo comenzaron a aplicar un curso antes y otras uno después, el pasado curso escolar fue el primero en el que salió la primera promoción de alumnos graduados en vez de diplomados o licenciados. Por lo general, aunque algunos alumnos las realizan con anterioridad (siempre tienen que ser tras haber superado el 50% de los créditos de la titulación), la mayor parte de ellos las realizan en su último año académico. Por esta razón, el pasado año se experimentó un considerable aumento de las solicitudes de prácticas en empresas.

Si sumamos el alto desempleo a la cantidad de alumnos que necesitan realizar prácticas para completar su etapa universitaria y sumamos la escasez de recursos de las empresas hoy en día, con lo que nos encontramos es con un auge tremendo de este tipo de convenios: los convenios de becarios.

Las empresas han descubierto el auténtico chollo que resulta «contratar» a un becario. Hace menos de un año, se podía tener a un trabajador durante una jornada laboral completa por un total de 0 euros. No había que pagar ni seguridad ni había porqué remunerar al becario por su trabajo. Visto lo fácil y barato que era conseguir trabajadores, se unieron al grupo empresas que aunque no estaban en una situación financiera complicada, sí querían rentabilizar más su negocio.

Durante el pasado 2013, el Gobierno decidió regular de alguna manera la situación de todos estos trabajadores, cuyo número estaba en aumento, y obligar a las empresas a pagar la Seguridad Social de todos los becarios.

El chollo de contratar becarios ya no resultaba tan barato y en ciertas ocasiones, esto desanimó aún más a algunas empresas a pagar un sueldo a sus empleados.

Como hemos hablado, muchas empresas consideran que emplear aun becario y no pagarle nada tan solo les resulta beneficioso, sin embargo, no se puede hacer esta afirmación tan a la ligera y resulta necesario realizar un estudio previo que nos indique cuándo es rentable pagar a un becario y cuándo no.

Los beneficios de pagar a los becarios

Conviene aclarar que cuando hablamos de pagar a los becarios, nos referimos en general a salarios dignos, no necesariamente lo suficientemente altos como para poder mantener a una familia o como para poder vivir con comodidades, pero sí a salarios que superen el mínimo.

Mejora la satisfacción y la productividad

Todo empleado que sienta que se valora su trabajo, trabajará con más ganas y de manera más productiva que otro que sienta que su trabajo no está valorado. Con un salario decente, el trabajador, en una gran parte de los casos, aumentará su productividad y reportará mayores beneficios a la empresa.

Se conocerán mejor las posibilidades de cada uno

Un trabajador motivado saca lo mejor de sí mismo. De esta manera, el empleador podrá saber cuál de los becarios tienen realmente un mejor potencial y cuáles no. Esto resulta mucho más positivo para la empresa de lo que puede parecer. Es común que una empresa saque varios puestos de becarios entre los cuáles elegirá a un futuro empleado. Esta decisión posiblemente tenga un importante impacto en el futuro del departamento o de la empresa en la que el becario vaya a trabajar. Por esta razón, motivar lo suficiente a los becarios para que ellos muestren lo mejor de sí mismos y de esta manera tomar la mejor decisión, merecerá a la larga más la pena que arañar euros durante los meses de la beca.