Durante esta crisis se ha hablado de la alta remuneración de ciertas cúpulas directivas de empresas cotizadas. Cesar Alierta, presidente de Telefónica cobró en 2011 la cantidad de 8,6 millones de Euros consiguiendo que su empresa generará mas de 10.000 millones de beneficios. Es uno de los directivos mejor pagados en España pero probablemente su sueldo se justifique tanto por los resultados como por la capitalización de Telefonica que a día de hoy capitaliza cerca de 50.000 millones de euros.
Sin embargo esta remuneración no es nada comparada con la remuneración de los directivos de La Seda de Barcelona. Una empresa Catalana que ha pasado en los últimos años de tener una capitalización de 362.687.340,10 € A 36. 268.734 € en la actualidad. Sus acciones han pasado de valer 10 euros a 1,6 euros. Una empresa que ha tenido perdidas operativas en los últimos años. Los accionistas minoritarios de La Seda de Barcelona denuncian que pese a los resultados de su gestión, los sueldos de sus directivos siguen al nivel de grandes empresas, incluso mucho mas allá de esos niveles. Un importante problema en la actualidad para la empresa.
El detalle de los sueldos del consejos de administración es el siguiente
SUELDO FIJO CONSEJEROS……………………………………475.000 EUROS
COMITÉ AUDITOR………………………………………………..110.000 EUROS
COMITÉ NOMBRAMIENTOS Y RETRIBU…………………60.000 EUROS
JOSE LUIS MORLANES…………………………………………..900.000 EUROS
CARLOS MOREIRA………………………………………………1.700.000 EUROS
T O T A L …………………………………………….. 3.245.000 EUROS
Para hacer una comparativa de lo que tendría que ganar el señor Alierta para ponerse el nivel de remuneración de la Junta Directiva de La Seda de Barcelona, deberia estar entorno a los 5.000 millones de euros. Una cantidad totalmente exorbitada, que sería totalmente inaceptable para sus accionistas.
Las remuneraciones en La Seda de Barcelona implican un alto grado de irresponsabilidad de la cúpula directiva tanto de cara a sus accionistas, como de cara a sus propios empleados, dado que abocan a la empresa a una situación realmente complicada. Es es en toda regla una losa muy pesada para una empresa con problema y desde luego un ejemplo de como un grupo de directivos puede poner sus intereses por encima de la viabilidad de la empresa, algo que sorprendentemente consienten una parte de sus accionistas.
Los accionista minoritarios de la empresa y que han formado una asociación son los únicos que están denunciando esta situación que consideran totalmente fuera de los parámetros de normalidad de gestión de una empresa.