Los inversores extranjeros invirtieron en España 6.700 millones de euros en junio, cifra que multiplica por más de cuatro la inyección que realizaron en mayo, que fue de 1.600 millones de euros, según los datos de la balanza de pagos publicados por el Banco de España.
¿Marcará el mes de junio una tendencia hacia las entradas netas de capital en España? Tendremos que esperar a verlo. Mientras tanto mantengamos las esperanzas porque hay que reconocer que invertir en España puede ser un atractivo para los inversores tradicionales que optan por inversiones seguras y rentables.
Son varias las cualidades que ofrece el mercado español para atraer a inversionistas. España es un país que recibe un promedio de 80 millones de visitantes por año, es el tercer destino turístico del mundo después de EEUU y Francia. No sólo se distingue por ser lugar vacacional por excelencia, sino también por ser destino de acogida de numerosos eventos deportivos, como el Mundial de Baloncesto que se está celebrando ahora en nuestro país.
Zonas como Valencia, Barcelona, Andalucía o Madrid se han convertido en potentes atractivos para las inversiones en propiedades. Estos inversores ven como sus alojamientos se llenan, año tras año, de visitantes no sólo extranjeros sino también nacionales que aprovechando la caída de precios de vuelos por aumento de la competencia entre compañías aéreas deciden, cada vez más, escoger España para un corto descanso.
Otra gran ventaja que ofrece el mercado español es el rendimiento económico elevado debido en gran parte a la mayor demanda interna, tanto en el consumo y la inversión. Las cifras del empleo continúan mejorando y, como consecuencia directa, los niveles de renta disponible en España mejoran día con día. Con la nueva reforma laboral se esperan buenos efectos en la economía. Pese a que una de cada cinco personas que quiere trabajar está en paro, es importante destacar la fortaleza de la economía sumergida. El sector privado se está desapalancando, la deuda de las familias sigue en descenso y se mantiene en su nivel más bajo desde 2006.
Por otra parte se están llevando a cabo planes, reformas o ajustes en varios ámbitos como el plan de ajuste fiscal, o la reforma del sector financiero que proporciona la esperanza de mayor crecimiento y estabilidad para la economía española. Adicionalmente, el reajuste inmobiliario está en proceso, se están reduciendo los precios, ya han caído un 15% y se estima que podrían caer aun algo más.
La economía española ya ha salido de la recesión en la que había entrado en 2012. Suma cuatro trimestres consecutivos en positivo, tras crecer entre abril y junio el 0,6%. Entre enero y marzo de 2014 repuntó un 0,4%, el 0,2% en el último de 2013 y el 0,1% en el penúltimo.
España está empezando a crecer y lo tiene que seguir haciendo, ¿Qué más razones necesitamos para invertir en España?
Sandra Ferreiro Hermida. EFPA España (asesores financieros)