El Banco Europeo de Inversiones (BEI) y Bankinter han procedido a la firma de un acuerdo para destinar un total de 400 millones de euros para apoyar la financiación de los proyectos de inversión que sean promovidos por pequeñas y medianas empresas y por empresas “Midcap”.
Se conoce como empresas “Midcap” a aquellas empresas que emplean a un máximo de 3.000 trabajadores.
Préstamos en condiciones más favorables
Esta ayuda que ofrecen ambas entidades financieras se formalizará a través de préstamos que conllevarán unas condiciones financieras más favorables que las existentes hasta ahora en el mercado bancario. Entre estas condiciones más favorables destacan los plazos de reembolso de los préstamos, que serán más amplios, y también unos tipos de interés más reducidos que los actuales de mercado. También se ofrecerá a las pequeñas y medianas empresas beneficiadas con estos préstamos una mayor flexibilidad a la hora de realizar dichos desembolsos.
200 millones de euros para el sector industrial y de servicios
De los 400 millones de euros que señala el acuerdo firmado entre ambas entidades financieras, 200 millones serán destinados a apoyar a los sectores industrial y de servicios, y muy especialmente a aquellos proyectos que se encuadren en el ámbito de la innovación.
Esta partida aportada por el Banco Europeo de Inversiones (BEI) será completada por Bankinter con otros 200 millones de euros adicionales. Según esta misma entidad financiera, una parte “importante” del préstamo estará dirigida a apoyar la financiación de estas compañías innovadoras en el marco del Instrumento de Riesgo Compartido (RSI según sus siglas en inglés) de garantías concedido por el Fondo Europeo de Inversiones (FEI), y bajo el que la entidad y el BEI comparten riesgos de crédito.
Contribuir al aumento de la productividad
Estos recursos destinados por el Banco Europeo de Inversiones y la entidad española Bankinter a apoyar pequeñas y medianas empresas y empresas “Midcap” tienen como objetivo principal contribuir de forma importante y definitiva al aumento de la productividad de las empresas beneficiarias, potenciando el desarrollo económico de las pequeñas y medianas empresas españolas y contribuyendo al aumento de su competitividad.
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