La reciente sentencia dada por el Tribunal General de la Unión Europea, falla a favor de la compañía estadounidense, ya que considera que la Comisión Europea se equivocaba al pedir la devolución de 13.000 millones de euros a dicha empresa.
Finalmente, tras una larga temporada de pleitos que ha llegado a durar hasta 4 años, el Gobierno irlandés y la empresa Apple han parecido quedar satisfechas con esta nueva sentencia. Por el contrario, la Comisión Europea no ha obtenido los resultados esperados, y tanto ella como la compañía electrónica tienen derecho a presentar un recurso de casación al Tribunal de Justicia de la UE en los próximos 70 días tras la sentencia.
La justicia da la razón a Apple
Además, como no se trata de una sentencia en firme, no habrá movimiento alguno de dinero. Apple tuvo que devolver al Gobierno irlandés 13.000 millones de euros, que se corresponden con el Impuesto sobre Sociedades de los ejercicios desde el año 2003 hasta el 2014, que a lo largo del tiempo pasaron de un 1%, en 2003, a un 0,005% en 2014.
Cabe destacar que en esta sentencia han cobrado un papel muy importante las consecuencias geopolíticas, ya que la administración de EEUU ha estado observando detenidamente la resolución en defensa de la compañía californiana.
Dada la notable baja cantidad de tributación que se le exigía a Apple por parte del Gobierno irlandés, la Comisión Europea sospechaba que se tratase de una ayuda estatal injusta. De esta manera, acabó declarando dicho trato de favor como un acto completamente fuera de la legalidad en el mercado interno. No pasó mucho tiempo hasta que el ejecutivo comunitario terminase demandando a la empresa multimillonaria, con el fin de recuperar dichas ayudas.
Por desgracia para la Comisión, el Tribunal ha declarado que el organismo europeo no ha conseguido demostrar que existiera una ventaja económica selectiva, coincidiendo así con el argumento dado por la fiscalía general. De todas maneras, el Tribunal se posiciona del lado de la CE en cuanto a la opinión de la misma sobre la fijación de impuestos bajo la ley irlandesa.
A pesar de estar de acuerdo en ese sentido, el Tribunal considera por encima de todo que la manera de actuar de Comisión no fue la adecuada desde un primer momento, cuando acusaron a las autoridades irlandesas de haber ofrecido una ventaja competitiva a Apple al no haber asignado las licencias de propiedad intelectual de las filiales de dicha multinacional.
Por otro lado, hay que recordar que no se trata de la primera sentencia contundente que la Comisión recibe por parte del Tribunal Europeo. Algo similar sucedió en el otoño del año anterior, con la cadena de cafeterías Starbucks, a la que la Comisión reclamó entre 20 y 30 millones de euros por haber obtenido beneficio de ayudas económicas de carácter ilegal.
Esto también sucedió con la marca automovilística Fiat, cuya sentencia fue del todo desfavorable para la CE con el litigio de los denominados tax rulings, ya que en un primer momento se llegaron a considerar ayudas de estado ilegales e incompatibles con el mercado interior.