Como ya comentáramos en entregas anteriores el desempeño exhibido por la plata en los últimos 12 meses ha provocado que cada vez más inversores busquen aprovechar el rendimiento de este metal precioso. Es por ello, que en esta oportunidad le daremos un breve resumen de algunas de las formas de acceder a la inversión en plata.
Como en todo metal, la opción más directa es la de la inversión física en plata. Es decir, la adquisición de un lingote de plata. Para que usted pueda relacionar adecuadamente el precio de la plata con el valor de su inversión en lingotes, deberá tener en cuenta que el precio de la plata se expresa en onzas y que un lingote pesa un kilogramo, es decir, aproximadamente unas 32 onzas.
Existen además de la comentada anteriormente, formas de invertir en el metal precioso, pero de manera indirecta. Así, como con la mayoría de las materias primas, podríamos recurrir a la utilización de contratos por diferencias. Estos instrumentos financieros, se tornan una buena opción, ya que el monto de la inversión necesario para comenzar a operar es bajo, debido al efecto apalancamiento. Por otro lado permiten obtener ganancias apostando tanto al alza como a la baja del metal.
Otra forma de inversión indirecta en plata es mediante la utilización de fondos cotizados (ETFs). En el mercado de la plata los más conocidos son Silver y Short Silver, de ETF Securities o el iShares Silver Trust.