Para una pyme o un autónomo el control de los gastos es simplemente vital. Generalmente este control se realiza de manera exhaustiva sobre todo lo que tiene que ver con el desempeño profesional, pero, a veces no somos tan estrictos con los gastos corrientes. Veremos tres claves para el control de los gastos corrientes en una pyme o para un autónomo.
En primer lugar debemos tomar conciencia de la importancia de estos gastos. Es evidente que no suponen lo mismo para todos los autónomos o todas las pymes, y, que de hecho, en ocasiones lo que para uno resulta tremendamente importante, para otro no lo es tanto.
Sin embargo, lo que no varía en ningún caso es la necesidad de controlar estos recibos y gastos corrientes, para ello existen tres recomendaciones básicas.
Tomar conciencia del gasto
Esta es la más sencilla de aplicar, y, a la vez, la que más olvidamos. En el marco del desarrollo profesional de una pyme solemos tender a considerar los gastos corrientes como una especie de gastos de segunda clase, centrando más nuestra atención en los gastos inherentes al desarrollo de la actividad profesional.
Obviamente esto es un error grave. Debemos tomar conciencia del gasto que suponen periódicamente los recibos comunes ya que, de este modo, vamos a poder trabajar en su ajuste, racionalización y por tanto, en minimizar el conjunto del gasto.
Elegir bien los proveedores
Aquí tenemos otro claro ejemplo de acción sencilla, pero que puede marcar la diferencia entre una buena gestión de nuestros gastos corrientes y otra que no lo sea.
Tomemos como ejemplo el recibo de la luz. Acercarnos a la propuesta de un proveedor como HolaLuz, donde vamos a encontrar, el precio de la luz más justo en cada momento, va a suponer sin ninguna duda esa diferencia entre optimizar el gasto en consumo eléctrico o no hacerlo. Además, opciones como HolaLuz, vienen acompañadas de valores añadidos como la no exigencia de permanencia, la claridad en los modelos de contrato, una atención al cliente cercana y sencilla, etcétera.
Utilizar las herramientas adecuadas para el control del gasto
Hoy en día no tenemos excusa. Existen decenas de herramientas de control del gasto que son tremendamente sencillas de utilizar y que se adaptan perfectamente a los dispositivos que utilizamos habitualmente (ordenador, tablet, Smartphone)
Estas herramientas nos permiten no sólo manejar un control exhaustivo de nuestros gastos, y por tanto, acceder a la opción de minimizar y racionalizar cualquier tipo de gasto y consumo, sino que además lo hacen de manera muy precisa, con modelos de funcionamiento sencillos y en muchos casos gratuitos o a bajo coste.
La oferta de estas herramientas es tan amplia que, con toda probabilidad, vas a poder encontrar una lo más adecuada posible para tus intereses y modelo de funcionamiento.
En definitiva, una buena elección del proveedor, una toma de conciencia de la importancia del gasto de recibos comunes y apoyarse en las herramientas de control a nuestro alcance, son elementos que van a ayudar de manera determinante en la racionalización del gasto, y por tanto, a mejorar las cuentas básicas de nuestra empresa o negocio.