En más de una ocasión nos hemos referido a la importancia cada vez mayor de la formación a la hora de la búsqueda de trabajo, obviamente desde la perspectiva del concepto global de formación aplicado a todos los sectores productivos del mercado laboral, pero que cobra lógicamente una importancia capital en lo que a las llamadas ofertas de empleo cualificado se refiere.
Y curiosamente, y tal vez para sorpresa de algunos de nuestros lectores, es precisamente dentro de esta oferta de empleo cualificado donde se produce unos de los desajustes más importantes entre lo que el mercado laboral a fecha de hoy puede llegar a ofrecer y el conjunto de demandantes de empleo inscritos en los servicios públicos de empleo; el alto número proporcional de solicitudes de títulos universitarios dentro de las ofertas de empleo cualificado es en relación al relativamente bajo número de demandantes inscritos en los servicios públicos de empleo que acreditan titulaciones universitarias.
Sin conocer aún de primera mano los datos relativos al año 2012 podemos perfectamente los datos que en diversos estudios se aportaron en relación al año 2011, año en el que sobre un 80% dentro de las ofertas de empleo cualificado solicitaban titulación universitaria frente a un escaso 14% dedemandantes inscritos en los servicios públicos de empleo que presentaban dichas situaciones, algo extensible a la formación profesional aunque en menor medida ya que frente al 20,5% de las ofertas de empleo que venían a solicitar estudios de formación profesional era por entonces 6,8 de los demandantes de empleo los que podían acreditar dichos estudios.
Obviamente y con una población de desempleados creciente la relación entre oferta y demanda no resulta efectivamente participen esa desproporción a título individual ya que la oferta de empleo como desgraciadamente sabemos no alcanza por supuesto a cubrir el número de individuos que ese porcentaje, ese 14% en el caso de los titulados universitarios, viene a suponer, pero sin embargo si refleja una descompensación evidente entre lo que el mercado laboral viene a demandar en la actualidad y la formación media de los demandantes de empleo.
Como dato añadido esta importancia de la formación, dato al que ya dedicábamos también anteriormente un artículo sobre la importancia de los idiomas a la hora de solicitar trabajo, debemos consignar que en aquel año 2011 cerca del 30% del conjunto general de las ofertas de empleo incluía dentro de los requisitos solicitados al perfil del candidato el conocimiento de uno o más idiomas extranjeros, lo que refuerza sin duda la teoría de que el proceso de búsqueda de empleo la formación continua es cada vez más imprescindible.
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