La implantación de los servicios low cost, surgida a finales del pasado siglo, obviamente ha terminado por modificar muchos conceptos en sectores como el alojamiento o el transporte aéreo de pasajeros. En este último caso la coexistencia entre las líneas aéreas convencionales y las low cost se ha visto marcada por los planteamientos de competencia; las líneas convencionales derivaban por un lado en muchos casos en la participación o creación de líneas de bajo coste mientras que en sus servicios regulares competían en servicios y no en precio; sin embargo de un tiempo a esta parte algo se está moviendo en este aspecto.
Una prueba de ello la podemos encontrar en el anuncio el pasado martes por parte de Iberia de un proceso de rediseño de su estructura de tarifas en rutas tanto nacionales como europeas, un rediseño que en boca de la compañía busca generar tarifas más atractivas y competitivas.
En una primera instancia se podría entender un reajuste orientado a la competencia con el resto de aerolíneas convencionales, sin embargo, si analizamos las novedades que se impondrán, todo apunta a que se busca en buena medida competir con las low cost.
Una de estas novedades, tal vez a priori la principal, consiste en el hecho de la creación de una nueva tarifa básica, que presentará una importante reducción de precio respecto a las tarifas habituales y que, en la senda de los servicios de las low cost, se dirige al viajero que solo porta equipaje de mano.
Iberia deja claro en su comunicación que busca con esta nueva tarifa acercarse al viajero cuya principal motivación en la elección de aerolínea es el precio.
Esta nueva tarifa convivirá con las tarifas clásica y flexible. En el caso de la tarifa clásica el pasaje incorpora el derecho a facturación de una maleta y elección de asiento, con la posibilidad de cambios (tras pago de suplemento) mientras que la flexible, junto a la opción de reembolsos, aportará como nuevo elemento la prioridad de embarque.
Estas tarifas se aplicarán como indicábamos en los vuelos nacionales y europeos tanto de Iberia como Iberia Express o Air Nostrum, incluyendo vuelos directos y conexiones.