Compra del supermercado online, ventajas y desventajas

El consumidor español prefiere desplazarse para hacer la compra

Sólo el 2% usa Internet habitualmente para adquirir productos de alimentación, un sector cuyo público ha cambiado sus hábitos de consumo por causa de la crisis con el claro objetivo de ahorrar.

La compra habitual sigue haciéndose en España a la manera tradicional, es decir, desplazándose para realizarla. Hasta el 98% de los consumidores prefiere el supermercado, el hipermercado o el mercado de toda la vida para adquirir productos de alimentación. Mientras, sólo el 2% de estos compradores opta por utilizar Internet para la misma actividad.
Compra on line
De forma más concreta, el 65% de los encuestados afirma que el supermercado es el sitio principal donde compra habitualmente los productos alimenticios. En segundo lugar, pero con más de 50 puntos de diferencia, se sitúan las tiendas locales o pequeño comercio como lugar habitual de compra con un 14% de los encuestados, seguidos muy de cerca, y en tercera posición, por los hipermercados con un 13%. Por último, con un 7%, queda el mercado municipal como principal referencia de compra para los consumidores. 

El ahorro al hacer la compra, clave

¿Por qué se decantan los españoles por las tiendas presenciales? Pues, básicamente, lo que motiva a un consumidor cada vez más crítico, exigente y ahorrador, es mantener una dieta saludable, no desperdiciar alimentos y tampoco gastar más dinero de lo necesario. Para lograr esos objetivos, ese perfil de comprador percibe que el mejor lugar para hacerlo es un comercio ‘cara a cara’.
Compra del supermercado online, ventajas y desventajas
Así se desprende de un estudio que han elaborado varias asociaciones de consumidores -CEACCU, FUCI, CECU, UNAE y UCA/CAUCE- junto con Mercadona basado en el análisis acerca del comportamiento de 2.030 personas a la hora de llenar la nevera. El espectro incluye ciudadanos de las 17 comunidades autónomas y las dos ciudades autonómicas que conforman el Estado.

El comercio ‘on line’ en alimentación, por explotar

En cuanto al 2% restante, que prefiere la compra de alimentos on line, en el propio estudio se afirma que «puede parecer que esto no se refleja con los otros datos de frecuencia de uso de comercio electrónico, pero hay que puntualizar que lo que se pregunta es el medio de compra ‘habitual’, aunque cada vez son más los consumidores que optan por Internet para realizar sus compras de alimentación, está claro que habitualmente, siguen acudiendo principalmente al establecimiento. Desde luego, no cabe duda que los datos de crecimiento del comercio electrónico y la situación real en alimentación hacen prever que existe un nicho de mercado por explotar y que el futuro inmediato nos traerá importantes novedades en este campo», agregan.

La crisis ha cambiado los hábitos de consumo

La situación económica de los últimos años, se señala en el estudio, ha provocado cambios en los hábitos de compra en el 76% de los encuestados. Así, los consumidores declaran, en un 37% de los casos, que buscan más las ofertas como consecuencia de la crisis, el 23% que asegura aprovechar más la comida, el 10% que ha reducido el gasto en alimentación y el 6% que asevera diversificar sus compras. Frente a ellos se sitúa el 24% que afirma no haber cambiado sus hábitos de consumo.
Compra on line II
En el grupo en el que menos cambios se han detectado ha sido en el de las familias numerosas, «posiblemente por el poco margen de maniobra del que disponen puesto que sin duda son los que suelen llevar las listas de las compras más ajustadas y mejor planificadas, los que mejor aprovechan los alimentos, etc.», se explica en la citada encuesta.

Canales para recibir ofertas

Para recibir o buscar información y promociones, el consumidor prefiere:

    • En primer lugar, con un 27%, en la propia tienda.
    • En segundo lugar, con menos de dos puntos de distancia con respecto al primero, en el buzón de correos, un 25%.
    • En tercer lugar, y a bastante diferencia con respecto a los dos primeros, en el correo electrónico, un 8%.
    • Ya en cuarto y quinto, lugar a pie de calle (7%) o en radio, prensa o televisión (6%).
    • El teléfono móvil, en último lugar, con un 4%.

Curiosamente, más de un 23% responde que no sabe o no contesta, siendo la edad un factor determinante a la hora de preferir recibir la información o las ofertas a través del móvil o del correo electrónico. Obviamente, cuanto más jóvenes, mayor preferencia por estos canales.

Hábitos alimenticios poco saludables

La frecuencia de consumo de los distintos alimentos distan de lo idóneo y reflejan unos hábitos alimenticios poco saludables. Al preguntar por la frecuencia de consumo de algunos alimentos, los datos indican lo siguiente.

      • Carne: un 71% la consume dos o tres veces a la semana
      • Pescado: un 25% tan sólo lo come un día a la semana y un 2%, nunca.
      • Verdura: un 7% la ingiere un día a la semana y un 1%, nunca.
      • Fruta: un 20% la consume dos o tres veces a la semana y un 5%, una vez a la semana.
      • Legumbres: un 46% de los consumidores encuestados tan sólo las lleva al plato una vez a la semana.
      • Alimentos industriales: un 6% de los consumidores encuestados opta por este tipo de productos a diario y un 20% lo hace dos o tres veces por semana.
      • Bebidas alcohólicas: un 9% de los consumidores las toma a diario.
      • Bebidas refrescantes: un 13 % de los consumidores las ingiere cada día.

Frecuencia de compra en alimentación

«Es obvio que nuestra frecuencia de compra está muy relacionada con nuestro estilo de vida, costumbres, disponibilidad de horarios y oferta de lugares de compra, entre otros factores. En general, la frecuencia de compra de productos no perecederos es menor que la de productos perecederos. Al analizar esta pregunta nos encontramos que el 47% de los encuestados realiza la compra de alimentos perecederos dos o tres veces a la semana y un 36 % lo hace una vez a la semana en caso de alimentos no perecederos», se indica en el estudio.

Productos frescos vs preparados

En general, los datos reflejan que los consumidores optan mayoritariamente por la compra de productos frescos frente al congelado o los platos preparados, aunque se perciben diferencias según el producto de compra en concreto.

El pescado, la estrella de los congelados

El producto que más adquiere el consumidor en formato congelado es el pescado; un 27% de los consumidores así lo afirma. Aquí tendría que ver mucho el precio, ya que es un producto en el que el aquél varía sustancialmente de comprarlo fresco a comprarlo congelado, además de su comodidad. Aun así, es mayor el porcentaje de consumidores que opta habitualmente por la compra del pescado fresco, un 71%.
mercado frutas

Conservas

En cuanto a los platos preparados/conservas, destaca el 23% de los consumidores que afirma adquirir las pastas y legumbres en este formato, que es un dato lógico dada la gran acogida con la que cuentan, básicamente por la facilidad para su preparación.

Los productos biológicos, menos consumidos por el precio

Por otra parte, según los datos, son muchos los consumidores que aún desconocen la diferencia de los productos biológicos y ecológicos respecto a los convencionales, ya que un 24% de ellos así lo afirma. Destaca también que casi la mitad de los encuestados, un 46%, no compra este tipo de productos porque considera que son demasiado caros.

Desconfianza en los transgénicos

Asimismo, «existe una gran desconfianza entre los consumidores a la hora de adquirir productos transgénicos: un 36% no se fía de ellos, un 11% considera que no hay suficiente información al respecto de futuros efectos en humanos y un 33% no sabe o no contesta, por lo que se indica desconocimiento al respecto».

Finalmente, como complemento a los hábitos de compra en alimentación, cabe subrayar que menos de una cuarta parte de los consumidores encuestados se alimenta fueran del hogar.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.