Crece la riqueza familiar en España

Era un hecho esperable para la vista de los datos sobre el incremento del ahorro familiar durante 2020 y el primer semestre de 2021. No obstante, el crecimiento de la riqueza familiar ha sido incluso superior al que se podía prever en nuestro país.

La riqueza de las familias en España es un baremo que mide las diferencias entre el ahorro de las familias y las deudas que poseen. Se trata de una medida complementaria al ahorro familiar, y que, en cierta medida puede ser un termómetro de la evolución de la economía, aunque, en este caso, totalmente mediatizado por la pandemia.

Los datos de la riqueza familiar según el Banco de España

En el informe, publicado por el banco de España, queda patente este crecimiento de la riqueza familiar que se cuantifica en un 8,6% más que el año anterior.

En los datos del organismo bancario los activos financieros en los hogares también crecían de manera importante, concretamente, más de un 5,4% respecto a los del año anterior, algo, lógico teniendo en cuenta el impacto de la pandemia en todos los ramos de la economía, incluyendo la economía familiar.

Dentro de los datos destacar el hecho de un aumento de la adquisición neta de activos financieros, junto a la revalorización de los mismos. Es importante también señalar que esto ocurrió con mayor fuerza durante el primer trimestre del año. También, durante el primer trimestre, la mayoría de los activos financieros de las familias españolas se situaba de la siguiente forma:

1. En efectivo y depósitos con un 42%
2. Acciones y participaciones en capital con un 24%
3. Seguros de ahorro y fondos de pensiones con un 16%
4. Fondos de inversión con un 15%

Dentro de todas estas herramientas, son los fondos de inversión los que en más han aumentado su presencia en los activos financieros de las familias, eligiendo prácticamente un 2%, mientras que las acciones son participaciones en capital han descendido de manera notable, básicamente un 3%.

En definitiva, se trata de un hecho ya esperado, pero que, según los datos del organismo bancario, supera la previsión inicial. Ya sabíamos que el ahorro familiar y el descenso del gasto iba a generar una diferencia superior en favor de la riqueza de las familias que, a priori, se podía estimar en torno al 5%. Sin embargo, como vemos, estamos con un crecimiento prácticamente cuatro puntos superior al esperado.

En cualquier caso, no es una lectura que debamos hacer sin participar del conjunto de la lectura económica que debemos extraer de la pandemia de coronavirus. No en vano, estamos ante una consecuencia directa de lo ocurrido en 2020, cuando, el grifo del gasto se recortó de manera exponencial en las familias, a la vez que aumentó el ahorro del miedo. Esa diferencia, que ahora se va liberando poco a poco, es la que nos marca una tendencia creciente tanto al volumen de ahorro familiar, como a la propia riqueza familiar que, si todo va como debería, se librará en los últimos meses de 2021, con un crecimiento no tan elevado y cada vez más racional.