La llegada del frío supone un aumento en el uso de sistemas de calefacción, lo que se traduce en facturas de energía más elevadas. Sin embargo, hay múltiples estrategias que pueden ayudarte a mantener tu hogar cálido sin sacrificar tu economía. En este artículo, exploraremos diversas técnicas y consejos prácticos para ahorrar en calefacción durante los meses más fríos del año.
Consejos para ahorrar en calefacción
Un buen aislamiento es clave para mantener el calor dentro de casa y evitar fugas de energía. Revisa el estado de ventanas, puertas y paredes, y considera invertir en materiales aislantes como burletes o doble acristalamiento. Aislar adecuadamente tu hogar puede representar un ahorro significativo en la factura de calefacción.
Mantener el termostato a una temperatura constante y moderada (alrededor de 20-21ºC) es más eficiente que subirlo y bajarlo constantemente. Además, reducir la temperatura un par de grados durante la noche o cuando no estés en casa puede generar un ahorro considerable.
Un sistema de calefacción en mal estado o sucio puede ser ineficiente y consumir más energía de la necesaria. Realizar un mantenimiento regular y limpiar los elementos del sistema (como radiadores o calderas) asegura su óptimo rendimiento y contribuye al ahorro energético.
Abrir las cortinas durante el día permite aprovechar la luz y el calor natural del sol. Por la noche, cerrarlas actúa como una barrera adicional contra el frío. Elegir cortinas gruesas o térmicas puede mejorar aún más este efecto. Ventilar la casa es necesario para renovar el aire, pero hacerlo durante las horas más frías puede resultar en una pérdida considerable de calor. Opta por ventilar durante las horas más cálidas y por un periodo corto de tiempo.
Utilizar ropa de abrigo y contar con una buena ropa de cama puede permitirte mantener una temperatura[…]Leer noticia completa en la fuente original