Bankia y Banca Cívica ya están cotizando en el mercado por parte de su capital (menos de la mitad, para que las cajas que hay detrás no pierdan su naturaleza jurídica).
Viendo la cronología de acontecimientos, uno diría que los poderes públicos y económicos se pusieron de acuerdo para camuflar la realidad y propiciar una salida digna de los dos SIPs a bolsa: