¿Cuándo debemos empezar a ahorrar e invertir?

El dilema de cada día es saber qué hacer con nuestro dinero. Y como vengo diciéndolo hace tiempo, existen distintas etapas de la vida en las que se pueden hacer diferentes cosas con él, y que estamos más o menos dispuestos a arriesgarnos a gastar o invertir el dinero.

Pero ahora pensemos en una de esas etapas únicamente, la de la juventud. Supongamos una persona joven, estudiante y que recién está cumpliendo su mayoría de edad, y nos preguntamos ¿es momento de ahorrar?


Aunque cientos de economistas digan que sí y los padres también apoyen esta moción, en mi idea personal, creo que el tiempo habría que gastarlo en ver cómo conseguir más ingresos. Una vez que logremos tener mayores beneficios mensuales, podremos pensar en ahorrar, invertir o ambas a la vez. Si bien es la edad perfecta para empezar a construir una economía personal sólida, aún hace falta hacerse de experiencia de lo que es el ahorro y qué tipos de instrumentos financieros son convenientes.

Entonces vayamos a lo primero que sería crear múltiples fuentes de ingreso, lo cual serán la clave de nuestra riqueza futura. Siendo jóvenes no tenemos que pensar en hacernos ricos instantáneamente (y lo digo yo que aún no supero los 25), sino buscar escalar posiciones económicas para alcanzar una base sólida de crecimiento de ingresos. Fundamental es encontrar un negocio exponencial, que hoy en día hay muchos. Y, cuando digo “negocio” me refiero a cualquier actividad que nos genere un ingreso.

Ahora viene la parte en que alguno piensa ¿cómo puedo yo generar una empresa que de ingresos y que estos sean crecientes a mediano plazo? ¡Cuidado! No nos dejemos engañar por los grandes gurúes y empresarios de antaño que hablan sobre la empresa gigante como único negocio posible, y como si esto no fuera aplicable para las personas jóvenes que posiblemente no tengan empleo y vivan con sus padres.

¡Pues nada de eso!, aquí 3 opciones básicas y simples para potenciar el ingreso:

Fuentes de ingreso a largo plazo

  • Cuenta remunerada: generar intereses, que no serán mucho pero ayudan
  • Depósito a plazo: remuneraciones se encuentran en depósitos a 6 meses a 1 años son las más convenientes (potencia a los de la cuenta remunerada).
  • Fondo de inversión: para los más arriesgados, con algo de capital es la mejor opción.

Fuentes de ingreso a mediano plazo

  • Comenzar su propio blog donde coloque publicidad. Si bien es un trabajo de hormiga, da su satisfacción al poco tiempo.
  • Dar lecciones acerca de lo que uno sepa: enseñar idiomas, asignaturas escolares, entre otras harán que tengamos un ingreso extra.
  • Vender algún producto: la modalidad de venta online gracias a empresas como eBay o Amazon se multiplicó hacia los usuarios consumidores, y ahora cualquiera puede ser un comerciante en la red.

Fuentes de ingreso ocasionales

  • Aquí la idea es más que nada, gastar poco. Dado que generar ingresos ocasionales no sería lo mejor, porque necesitamos algo a mediano y largo plazo que pueda ser constante. Lo ocasional lleva a tener más vacas flacas que gordas…

Bien, ahora que tenemos un panorama de cómo aumentar nuestros ingresos mensuales, ¿empezamos a ahorrar? Pues claro que no, todavía no hemos visto un centavo de rentabilidad, hay que reinvertir en el negocio empezado. Los intereses de los fondos y depósitos, recolocarlos por algunos meses más. El dinero ganado por la publicidad de nuestro sitio de Internet, usarlo para mejorar el sitio o crear alguno nuevo, así sucesivamente.

De esta manera podremos ver que al término de un año o dos podremos tener una base sólida para lanzarnos al ahorro comprometido y la inversión sólida. Sin embargo, lo voy a mantener hasta que deje de ser joven, a la edad del estudio, el dinero hay que administrarlo bien, (no digo que no se ahorre ni un euro) y poder disfrutarlo mientras se salva algo para el futuro.

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