Que el Banco de España se alineaba con las propuestas más neoliberales en materia de empleo no era desconocido, pero hasta ahora se había cuidado mucho de tomar las posiciones más radicales, aunque parece que esa prudencia que se le puede exigir a un organismo de supervisión financiera nacional ha pasado a mejor vida.
En la presentación de su “Informe Anual 2010″, el Banco de España no ha dudado en responsabilizar al ordenamiento jurídico laboral de las elevadas tasas de desempleo que sufre nuestra economía, debido a su incapacidad para adaptarse a las circunstancias de cada conyuntura económica.
Así, las conclusiones del “Informe Anual 2010″ son claras y unidireccionales. En primer lugar abogan por una mayor flexibilización del mercado laboral, recrudeciendo la actual reforma laboral, demasiado corta a juicio de la entidad financiera. Esta flexibilidad debería de ser tanto interna como externa.
Continuar leyendo en Dinero Experto…