Ser rico no tiene el mismo significado para unos, que para otros. Las variables que se sopesan para valorar si se es rico o no, son bastante subjetivas, pero en esta concepción, la economía del país en el que nos encontremos, juega un papel destacado. Por ello, de la comparativa entre España, uno de los países más golpeados por la crisis económica mundial, y EE.UU, la potencia por excelencia, se pueden extraer conclusiones bastante curiosas.
El nivel adquisitivo de los estadounidenses está muy por encima del nuestro, esto resulta obvio, pero la causa no se asienta exclusivamente sobre la base de unos mejores sueldos. Pues, lo que pueden adquirir con ellos, las posibilidades de tenerlo, así como la concepción de sus finanzas y estilo de vida, son también determinantes en que la riqueza de los estadounidenses sea en términos de valor y no solo económicos, más elevada que la nuestra.
¿Por qué son más ricos que nosotros?
En América, la necesidad de cosechar éxito profesional es la premisa que mueve las expectativas económicas de los estadounidenses, por el contrario, en España, es el salario mensual el que marca los esfuerzos laborales de los españoles, quedando el triunfo profesional relegado a un segundo plano. Si a esto le añadimos, que en EE.UU, se vende como el país de las oportunidades, y el nuestro sigue siendo una sociedad jerárquica basada primariamente en relaciones personales o de parentesco, ya tenemos la primera máxima que nos lleva a ese desplazamiento de la motivación hacia el crecimiento profesional que encontramos en nuestro país. En EE.UU, cualquiera puede empezar de cero, en España, el enchufe es lo más importante.
En EE.UU, las personas que se han enriquecido están bien vistas y los ricos pueden hacer gala de su éxito. Son ejemplos a seguir. En España, la concepción hacia el rico dista bastante y a primera vista genera desconfianza. Lo primero que piensas cuando ves a una persona que hace ostentación de su dinero, es sí no lo habrá ganado ilícitamente. Y qué decir tiene, si la persona que lo hace es político o empresario conocido. En España, nadie se hace rico trabajando, en EE.UU, si tienes éxito en tu trabajo, lo lograrás.
En EE.UU, cobran más y pagan menos
Pero no carguemos toda la culpa en la mentalidad española, pues lo cierto es que en EE.UU cobran más y pagan menos. Así es. Sus salarios son más elevados, y el precio de bienes y servicios básicos, como puede ser el acceso a la vivienda, es más llevadero para ellos, que para los españoles. El salario mínimo que viene cobrando un estadounidense se situaría en algo más de los 970 euros mensuales, mientras que el de los españoles se sitúa en 645,30 euros.
En España es mejor no presumir de lo que se tiene
Para terminar, hagamos una comparativa entre la evolución de la economía estadounidense y la española. Sabido es, que la economía estadounidense necesita crecer menos para empezar a generar empleo, pero en esta ocasión, a esta realidad hay que sumar que el ingreso por persona en América también aumentó en diciembre de 2012, y ello a pesar de la crisis que también les afecta, en un 2,6%, según la Oficina de Estadísticas Laborales de EE.UU. En España sin embargo, asistimos a la progresiva disminución de calidad de vida de los hogares españoles, asfixiados por las deudas e incapaces de afrontar sus pagos, con los consiguientes efectos negativos para toda la economía y la sociedad en general.
Fuente gráfico: Quartz
Por consiguiente, si el nivel adquisitivo y la cantidad de dinero en circulación aumenta, también lo hace el consumo, y por ende, la producción, el trabajo, y vuelta al círculo vicioso de la generación de su riqueza. En España lo que tenemos es todo lo contrario, recesión.
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