El IPC de febrero cumplió con las previsiones y descendió dos décimas para situarse en el 0,8%. ¿Comienzo de deflación? Nada más lejos de la realidad. La caída se explica por la evolución negativa de los precios de los alimentos (-2,7%) y el mantenimiento del precio de los carburantes frente al aumento en febrero de 2009. Además, también cayeron los precios del grupo ocio y cultural, que se dejaron un 2,5%.
La inflación está pasando prácticamente desapercibida en el debate político y económico, ya que por el momento parece que la principal preocupación es el crecimiento económico. En este sentido, parece que el riesgo de caer en deflación ha pasado, si bien los precios han mostrado un comportamiento mucho menos alcista de lo esperado. En este sentido, la previsión de inflación para 2010 ha ido decreciendo y de una posible hiperinflación hemos pasado a unas tasas controladas a las que incluso les cuesta subir.
Según el alza de las pensiones que reflejan los Presupuestos Generales del Estado de 2010 , el objetivo de IPC 2010 estaría fijado en el 1%, mientras que distintos estudios lo colocan en el 1,3-1,5%.
En realidad, el IPC recoge ahora el impacto negativo de la caída del consumo en los precios y parte de la previsión de aumento inflacionario se debe a la subida del IVA y la paulatina retirada de las medidas anticrisis.