Sabemos muy bien que el mundo está controlado por pocas manos, y el negocio de la auditoría a nivel nacional y mundial ¿por qué ha de ser distinto? Así es como Ernst & Young y PwC son las compañías de auditoría que mayor peso han ganado entre las cotizadas españolas, mientras Deloitte sigue siendo el líder.
Aunque todavía falta que se realice la convocación de casi 20 juntas de accionistas, las cuentas de las principales compañías del mercado en cuanto a la empresa auditora que la seguirá en 2011, parecen estar claras y estables. Se estima que de las 92 empresas que cotizan en el índice general de la Bolsa de Madrid (sacando a las firmas del Ibex 35, del MAB y de otros mercados alternativos), unas 80 ya han decidido quién les auditará este año.
El oligopolio, como lo veo yo, lo manejan las mismas cinco grandes firmas de siempre:
- Deloitte
- PwC
- Ernst & Young (E&Y)
- KPMG
- BDO
Entre ellas, se hacen el reparto del mercado de las compañías que cotizan en los mercados españoles, dado que solamente Dogi ha elegido una pequeña firma, Hispania Alfa Capital. Pero no solo se reparten las cuentas de las empresas, sino que controlan las normas contables a nivel mundial, deciden cómo debe opinar el fisco y pueden afectar a toda una economía, o imponer tendencias (dada su gran y excelentísima reputación) en el mercado de valores, por simples anuncios de futuros IPC Blog.
Por un año más, Deloitte sigue siendo el líder del sector. Sin embargo, su participación en el mercado ha decaído, dado que de las 39 compañías cotizadas a las que auditaba el año pasado, 28 ya han decidido seguir confiándole la revisión de sus cuentas, pero aún hay siete de las que nada se sabe.
A continuación, un cuadro que muestra las variaciones de este año:
Auditora: | Deloitte | PwC | Ernst & Young | KPMG | BDO |
Ganadas: | 0 | 2 | 2 | 0 | 0 |
Perdidas: | 3 | 0 | 0 | 1 | 0 |
Por decidir: | 8 | 0 | 1 | 0 | 0 |
Cantidad 2010: | 39 | 25 | 12 | 11 | 5 |
Cantidad 2011: | 28 | 27 | 13 | 10 | 5 |
Así es como parece que la firma cederá algo de terreno a sus competidores, y esto se debe a que ha perdido a tres grandes clientes: Almirall y Ence, cuyas cuentas revisará PwC, y Cepsa, que será auditada por E&Y.
De todas las grandes, BDO aparece como la callada y de perfil bajo, que mantiene a sus 5 compañías que auditó el año pasado del mercado continuo. Esta es una firma prometedora, que aún no tiene gran influencia política como las demás, aunque no dudemos que terminará buscando lo mismo: un espacio en la determinación de los lineamientos a nivel nacional y global; siempre a favor de sus clientes estrella.
No hace falta analizar mucho para ver que existen quejas de las firmas medianas sobre las Cuatro Grandes que auditan las cuentas de todas las más importantes compañías españolas y de que pesan más del 70% en la facturación del sector. La situación es común a la de otros países, y parece que la Comisión Europea ha tomado cartas en el asunto para «evaluar» la posibilidad de tomar medidas para reducir la concentración.
Esperamos que por el bien de la profesión, esto se acabe algún día. Es imposible para el contador público promedio salir adelante frente a los gigantes auditores que hacen agua si se trata de pequeñas empresas.