Tres claves que sí funcionan para ahorrar gastos en el automóvil

Para aquellos usuarios que utilizan sus vehículos a diario, que son muchos más aún de lo que probablemente pudiera parecer a tenor de los últimos estudios sobre la reducción del uso de los vehículos particulares, el hecho de ahorrar gastos generados por el vehículo, no sólo combustible, se convierte probablemente en uno de los focos de preocupación más importantes en lo que a ahorro se refiere. Y es normal, el hecho de aplicar medidas funcionales para tratar de minimizar los gastos de un coche en comparación a no aplicarlas puede llegar a suponer una media de gastos anuales mucho más elevada de lo que en principio pueda parecer;  sí, estamos hablando de cantidades que se miden en miles, no en cientos.

Prevenir es mejor que curar

Cuando hablamos de prevención lo hacemos desde la óptica de, algo tan básico como la elección de un modelo determinado de vehículo a la hora de su compra, esto, con todo, resulta tremendamente importante  y sería siempre más que aconsejable; tratar de mezclar nuestros gustos particulares en cuestiones como diseño y motorización con cuestiones como consumos, devaluaciones de precio, factores de impacto medioambiental, en definitiva con todo lo que de un modo u otro puede contribuir a los gastos de un coche.

Prevenir también es acudir al seguro que mejor se adapte a nuestras necesidades, ojo, este seguro no siempre necesariamente tiene por qué ser el más barato, deberemos tener en cuenta realmente nuestro perfil de conductor, el kilometraje efectivo que realizamos al cabo del año etc. Lo que sí es una evidencia es que afortunadamente para el usuario el nivel de comparativa existente hoy en día a través de cualquiera de los comparadores de seguros en la red puede llegar a ofrecer descuentos en algunos casos, sobre todo en el de aquellos que no han modificado mucho en el tiempo sus pólizas , que pueden llegar hasta el 50%.

El taller y el hágaselo usted mismo

Es un hecho comprobado que un mal reglaje en conjunto de un vehículo de más de cinco años que se utiliza a diario en un desplazamiento corto/medio, puede llegar a generar un aumento de los gastos (fundamentalmente de consumo de combustible) en el entorno de los 1000 € anuales, obviamente tal y como están las cosas no estamos para muchas bromas con estas cantidades.

Resulta fundamental por tanto una buena puesta a punto del automóvil, esta puesta a punto va a tener necesariamente que realizarse en las cuestiones básicas del vehículo como aceite, filtros, presiones, neumáticos, pero también en todas aquellas cuestiones que puedan repercutir en el consumo, o pequeños arreglos que puedan derivar, por no realizarlos, en futuros problemas y más gastos. En este sentido se publicaba a finales del pasado semestre un informe en el que se venía a afirmar que las reparaciones caseras de vehículos, el hágaselo usted mismo, había aumentado en los dos últimos años prácticamente hasta un 80%.

En lo que se refiere a pequeñas reparaciones, o cuestiones como la sustitución de un limpiaparabrisas, obviamente todo lo que podamos hacer nosotros va a suponer un ahorro en relación a que lo realice un profesional, sin embargo, el nivel de estas reparaciones tiene que estar acorde a nuestra verdadera habilidad para hacerlo, cuidado no vaya a ser peor el remedio que la enfermedad. En cualquier caso ocuparnos de este tipo de cuestiones menores puede también aportar un ahorro interesante a sumar.

¿Y conduciendo?

Seguro que estas alturas al lector ya le han proporcionado cientos de consejos sobre cómo ahorrar combustible, algunos ciertamente prácticos y realistas, como aplicar una conducción eficiente, y otros aún no excesivamente comprobados, como aquellos que aconsejan repostar a determinadas horas en función de las temperaturas y la posible evaporación del combustible.

Lo que está comprobado es que una conducción eficiente, que es aquella que participa de acciones como evitar acelerones innecesarios, el uso de marchas largas, no aumentar innecesariamente las revoluciones del motor, aprovechar la energía de los automóviles a través del freno motor en las frenadas, etc. unido a cuestiones relacionadas con la prevención, como una buena presión de los neumáticos, un coche bien reglado o un uso correcto y no abusivo de los climatizadores y aire acondicionado, puede proporcionar un ahorro por encima de los 500 € anuales de manera comparativa a quien no aplique este tipo de cuestiones.

Si a esto le sumamos cuestiones prácticas, como llenar el depósito los días de menor precio de los combustibles, lo cierto es que se puede obtener realmente una disminución notable en los gastos a la hora de la conducción.

Como hemos podido ver estamos hablando realmente de una diferencia importante de dinero entre quienes deciden vigilar las claves que pueden proporcionar ahorro y los que no, en su mano queda elegir grupo en el que desea estar.

Imagen1: loggaWiggler pixabay.com

Imagen 2 PublicDomainPictures pixabay.com