El grupo BFA-Bankia ha vendido una «importante» cartera de créditos fallidos de pymes y particulares sin garantía real, cuyo importe total asciende a 800 millones de euros, ha informado la entidad en un comunicado.
En concreto, la cartera cuenta con aproximadamente 127.000 créditos, con una antigüedad media de cinco años. En torno al 80% de los mismos proceden de clientes particulares.
La enajenación de esta cartera, desarrollada en la denominada ‘Operación Hispania’, responde a los planes de Bankia de desinvertir en activos no estratégicos.
Así pues, la entidad nacionalizada traspasará los citados préstamos a dos fondos de inversión: el noruego Aktiv Kapital y el luxemburgués Oko Investments. La operación se estructuró en una subcartera de créditos de consumo de particulares, que ha comprado Aktiv Kapital, y otra de los procedentes de pymes, adquirida por Oko Investments.
Según indicó Bankia, esta desinversión tendrá un impacto positivo en la cuenta de resultados del banco, al asegurar que los préstamos están totalmente dotados.
El proceso de subasta competitiva se inició el pasado mes de marzo, en el que participaron los principales fondos de inversión y entidades financieras internacionales especializados en este tipo de actividad.
«La operación ha culminado en un plazo de tiempo muy ajustado, pese a la situación adversa y las circunstancias especiales a las que está sometido el mercado», se congratuló la entidad.
Esta operación se enmarca dentro de la estrategia del banco de reducir los activos improductivos a la mitad, hasta situarlos en 30.000 millones de euros, durante los próximos tres años.