Domicilio fiscal y padrón son dos elementos diferentes que suelen coincidir en la mayoría de ocasiones pero ¿es obligatorio que lo hagan? ¿Existen riesgos o consecuencias cuando no es así?
¿Deben coincidir domicilio fiscal y lugar de empadronamiento? Aunque para muchos pueda resultar una cuestión baladí, lo cierto es que se trata de una pregunta bastante recurrente para miles de contribuyentes. Hoy en día no es extraño que domicilio fiscal y padrón sean diferentes y que por lo tanto surjan dudas respecto a donde hacer la declaración de la renta, pero ¿Es esto correcto?
Padrón y domicilio fiscal: lo que dice la Ley
En principio y según la ley, domicilio fiscal y padrón no tienen por qué coincidir, aunque lo lógico es que lo hagan.
Esto es lo que se desprende, entre otras, de una Sentencia del Tribunal Supremo del 9 de octubre de 2001, según la cual «el Padrón de habitantes y el Registro a efectos tributarios de domicilios fiscales son registros administrativos independientes y no intercomunicados automáticamente, de modo que el cambio de domicilio efectuado por una persona en el Padrón de habitantes, por sí solo, no supone un cambio coetáneo y paralelo del domicilio fiscal, ni tampoco sustituye a la declaración tributaria expresa». Sin embargo, es relativamente sencillo contravenir esta disposición y bastaría con argumentar que lo lógico es que domicilio fiscal y domicilio de empadronamiento sean el mismo si tenemos en cuenta que la Ley de IRPF define al primero como «del lugar de localización del obligado tributario en sus relacione con la Administración Tributarias» y en el caso de las personas físicas, su domicilio fiscal ser «será el de su residencia habitual. No obstante, si ejerce principalmente una actividad económica, la Administración podrá considerar como domicilio fiscal aquel en el que se realice la[…]Leer noticia completa en la fuente original