Parece que los bancos en España están cambiando de ritmo. Después de meses de contención, en este 2025 empiezan a soltar algo más de cuerda. La financiación vuelve a fluir, tanto para familias como para empresas, y eso, aunque no lo veas aún en tu cuenta corriente, puede afectarte más de lo que crees.
El crédito al consumo ha subido, las hipotecas empiezan a moverse con más alegría y las empresas, sobre todo las pequeñas, están empezando a recibir algo más de atención por parte de las entidades. ¿Por qué ahora? ¿Y qué implica esto para ti, que estás al otro lado del mostrador? Vamos al grano.
El crédito vuelve, y no por casualidad
Todo esto viene motivado por algo bastante claro: el Banco Central Europeo ha empezado a relajar los tipos de interés. No son bajadas espectaculares, pero sí lo justo para que los bancos vuelvan a ver atractivo en prestar dinero.
Y claro, cuando el dinero se vuelve más barato, empieza a circular. En 2024, el crédito a familias creció un 1,4 %, y la financiación al consumo se disparó casi un 7 %. ¿Significa eso que cualquiera puede ir ahora a pedir una hipoteca o un préstamo para cambiar de coche y se lo van a conceder sin más? Pues no exactamente, pero sí es cierto que las condiciones se están volviendo más accesibles.
Los bancos vuelven a competir entre ellos, y eso se nota en las ofertas. Tipos más bajos, menos comisiones, plazos más flexibles. No es una barra libre, pero ya no es la sequía de hace un año.
Qué impacto tiene en tu día a día
Lo primero que puede cambiar es tu relación con el crédito. Si estabas esperando a que bajaran un poco los intereses para comprarte una vivienda,[…]Leer noticia completa en la fuente original