Dicen que por el mundo, en los más diversos sectores, existen personas que, sin querer, sin proponérselo, son capaces de marcar tendencias. En este caso, no sabremos si ese afán de compra de periódicos locales (lleva más de 60 adquiridos) por parte de alguien tan influyente como Warren Buffett tendrá que ver en esta noticia, o mejor dicho tendrá que ver en la determinación de la operación que acaba de cerrar Jeff Bezos, el padre de Amazon; pero de lo que nos cabe ninguna duda es que si Buffet compra más de 60 periódicos y si ahora Bezos adquiere el Washington Post, algo está pasando con la prensa escrita en Estados Unidos; o mejor aún, algo va a pasar.
La compra de este prestigioso diario (en horas bajas es cierto) por parte de Bezos que se escenificará dentro de poco con el pago de algo menos de 200 millones de euros, es un paso más en la carrera empresarial del padre de la mayor distribuidora de libros digitales, que, posteriormente, se ha convertido en una de esas máquinas de hacer dinero nacidas en Internet y que van dando saltos al mundo presencial como quien no quiere la cosa.
Varios asuntos resultan interesantes en esta adquisición,el primero de ellos sin duda el objeto de compra; estamos ante uno de los diarios no sólo con mayor historia del país, sino también con mayor nivel de prestigio, un diario que ha sido enseña de la información y que sin duda cuenta con un alto nivel de respeto dentro del propio sector nacional e internacional. La segunda cuestión llamativa es que estamos ante una compra personal de Bezos.
Probablemente en el primer pensamiento que pudiera surgir ante la unión de este empresario y este diario pasará necesariamente por Amazon, algo que sin embargo no va a ser así, ya que esta compra se realiza al margen de la compañía, y recaerá exclusivamente a título personal, como decimos, en el multimillonario empresario.
A partir de la escenificación de la compra quedan muchas cuestiones por tener en cuenta. En principio la estructura directiva del diario, cuatro generaciones Graham que ha sido la espina dorsal del diario durante cerca de 80 años, va a continuar al frente del mismo, de la misma manera, los empleados al menos de momento, no van a ver peligrar sus puestos de trabajo.
Bezos afirma encontrarse muy ilusionado ante un proyecto del que reconoce le supone adentrarse en terreno desconocido, las maniobras de mantenimiento de la estructura directiva, y este asumir el desconocimiento del medio podrían parecer augurar al menos un periodo de transición suave, pero estos términos no deben entrar en el vocabulario del multimillonario padre de Amazon; en una carta dirigida a los empleados ya les ha comunicado su intención de no ser una mera cara que se pasea por la redacción, y que se realizarán profundas transformaciones en las cuales Internet va a jugar un papel básico.
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