Las inversiones son básicamente renunciar a un consumo actual a cambio de obtener unos beneficios futuros. A menudo muchos ven la inversión como algo muy a largo plazo, pero aunque actualmente no estemos en el mejor momento, también las hay a corto plazo, por si no estamos seguros de necesitar el dinero dentro de poco.
La inversión es el instrumento que se utiliza para llegar a objetivos. Una persona decide invertir en función de unas metas que quiere conseguir, que suele ser la rentabilidad de una cantidad de dinero que tiene parado. Es lo que se conoce como ingresos pasivos, es decir, obtener dinero a cambio de no hacer una actividad como tal.
Hay diversos tipos de inversiones, pero a continuación les mostraremos los principales tipos de inversiones. Algunas de ellas se basan en los objetivos para los cuales se realizan, otras en el tiempo y otras en la cantidad de veces que han de realizarse
- Inversiones de Propiedad: en teoría, y hasta ahora, a la larga es seguro y rentable invertir en una propiedad. Es favorable para aquellas empresas o particulares que se propongan objetivos a largo plazo. En España las familias tienen “tradición” de adquirir propiedades, al contrario que en otros países de la Unión Europea.
- Depósitos a corto plazo y largo plazo: un depósito en el banco es la forma más simple de la inversión a corto plazo. Una de las principales ventajas de esta inversión es que, el proveedor tiene en teoría 100% de garantizada la rentabilidad. Sin embargo, los retornos que se ofrecen son bajos en comparación con otras inversiones, ya que esa baja rentabilidad es el precio a pagar por la seguridad ofrecida. A corto plazo el depósito ofrece total liquidez y hoy en día no suelen penalizar por retirar el dinero antes[…]Leer noticia completa en la fuente original