En cuestión de días la Navidad se apoderará de todos los españoles, pero no será hasta el día 22 de diciembre, cuando en realidad se dé el pistoletazo de salida a estas fiestas con la celebración del Sorteo Extraordinario de Lotería de Navidad. Muchas personas tienen depositadas parte de sus ilusiones en el Gordo. A pesar de la crisis las ventas no se han resentido en ningún momento durante los últimos años.
Sin embargo, desde enero de 2013 se viene aplicando un gravamen del 20% sobre los premios que rebasen los 2.500 euros de las Loterías y Apuestas del Estado. Esto implica que una persona que se lleve cualquier premio grande o varias pedreas por valor de 3.000 euros tenga que destinar 600 euros a las arcas de Hacienda. Este dinero se le descuenta al beneficiario en el momento de cobrar el premio, por lo que debe valorar si realmente le merece la pena invertir demasiado dinero en la Lotería de Navidad y en el Niño.
¿Pero qué ocurriría si comparamos la Lotería de Navidad por ejemplo con el Euromillones u otro sorteo? Habría que recurrir a la esperanza matemática, que se encuentra vinculado con el porcentaje del dinero recaudado que se distribuye en premios. En el caso de la de Navidad alcanza el 70% frente al 50% del Euromillones o el 55% de La Quiniela, Primitiva y el Gordo de la Primitiva.
La Lotería de Navidad, además de ser la que cuenta con una mejor esperanza matemática, también nos aporta unas mayores posibilidades de resultar agraciados, aunque a veces haya que conformarse con premios menores como el reintegro o la pedrea. La probabilidad de conseguir el Gordo de la Lotería de Navidad es de 1 entre 100.00, mientras que en el caso del Euromillones es de 1 entre 116.531.800. Siempre a la hora de conseguir el premio más grande.
Las posibilidades de conseguir algún tipo de premio, aunque se trate del reintegro, alcanza el 15,30 para los que jueguen a la Lotería de Navidad, reduciéndose a la mitad para los del Euromillones. Solo el Gordo de Primativa, con el 16,22% presenta unos mejores números en este sentido.
Al igual que resulta más sencillo acabar premiado por el Gordo de Navidad, el premio es mucho más bajo respecto al Euromillones y otras apuestas y la participación, de 20 euros, resulta la más cara. Esto puede que asemeje un poco más al sorteo de Navidad con los otros, sobre todo si se relaciona el premio más alto, con la probabilidad de que toque y el precio del boleto.
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