Las tarjetas Revolving han ganado popularidad en los últimos años debido a su aparente flexibilidad y facilidad de uso. Sin embargo, estas tarjetas también han demostrado ser una trampa financiera para muchos usuarios.
Entender cómo funcionan y por qué pueden ser peligrosas es esencial para evitar problemas financieros a largo plazo. Vamos a explorar las razones por las que las tarjetas Revolving han resultado ser un riesgo significativo.
¿Qué son las tarjetas Revolving?
Las tarjetas Revolving son una forma de crédito que permite a los usuarios realizar compras y luego pagar una cantidad mínima mensual, en lugar de liquidar el saldo completo al final del mes. La deuda restante se «revoluciona» al siguiente mes, acumulando intereses.
A primera vista, esto puede parecer una solución conveniente para quienes necesitan un respiro financiero, pero las desventajas pueden superar rápidamente las ventajas.
Funcionamiento básico
- Crédito renovable: A diferencia de una tarjeta de crédito tradicional, donde se espera que el saldo se pague en su totalidad cada mes, las tarjetas Revolving permiten mantener un saldo y pagar solo una parte cada mes.
- Intereses acumulativos: Los intereses se acumulan sobre el saldo restante, lo que puede llevar a un aumento exponencial de la deuda si solo se hacen pagos mínimos.
Los peligros financieros de las tarjetas Revolving
Las tarjetas Revolving pueden parecer una herramienta útil para gestionar gastos, pero su estructura puede llevar a problemas financieros graves. Aquí te explicamos por qué:
Intereses elevados
Uno de los mayores peligros de las tarjetas Revolving son los altos tipos de interés que suelen aplicar. Las tasas de interés de estas tarjetas pueden superar fácilmente el 20% anual, y en algunos casos, pueden llegar al 30% o más. Esto significa que, si solo pagas el mínimo mensual, una parte[…]Leer noticia completa en la fuente original