Las finanzasde los españoles parecen estar encasilladas. Según informaba durante días atrás el secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, lo mejor para sus hijos no es dejarles un piso. Sin embargo, todo esto se contradice con la política tributaria y social instaurada en el país desde la democracia.
En base a lo que plantea el Secretario, se debería buscar que la vivienda pierda terreno frente a otras alternativas de ahorro e inversión, más líquidas y productivas.
Actualmente, existen 27 millones de casas y algo más de 17 millones de familias registradas por la EPA. De esta manera, España se convierte en uno de los países con mayor riqueza de los hogares concentrada en el inmobiliario. Con un valor del 530% sobre el PIB, frente al aproximadamente 600% que supone el patrimonio total de las familias, el inmobiliario sigue siendo el rey de las colocaciones dinerarias.
¿Dónde está el dinero que no se coloca en ladrillos?
Según se indicó por el Banco de España, los españoles optan por los vehículos de inversión y ahorro más conservadores. En este sentido, cerca del 50% de la riqueza de las familias no asociada al inmobiliario (859.913 millones de euros de 1,7 billones) corresponde a efectivo y depósitos. Del total indicado, el 53% son depósitos a plazo o estructurados, y el 35% son depósitos transferibles.
Seguido a estos, quedan las inversiones en acciones, cotizadas o no, y participaciones en sociedades de responsabilidad limitada, en cooperativas, entre otras. Asimismo, encontramos en esta bolsa a los fondos de inversión, y cuotas participativas que emiten las cajas de ahorros.
En tercer lugar, las reservas técnicas en seguros donde españoles guardan aproximadamente unos 268.600 millones de euros.
Por último, el dinero se encuentra en valores distintos de acciones y las cuentas pendientes de cobro, que representan poco más del 3%, cada uno. Dentro de ellos encontramos a los instrumentos financieros al portador que no confieren derechos de propiedad sobre la institución que los emite, los derivados y las permutas de los tipos de interés.
De cada 100 euros, los españoles invertimos así:
- Inmobiliario: 76
- Reservas técnicas de seguro: 3,65
- Acciones y otras: 7,11
- Efectivo y depósitos: 11,69
- Otros valores: 1,55
El problema radica en que la inversión no se ha modificado en estos últimos 10 años, basándose preferentemente en la que no es productiva. Es decir que, las familias no han cambiado sus ahorros en depósitos, acciones en empresas y seguros; y mucho menos las inmobiliarias.
Los españoles se han convertidos aún más reacios al riesgo tras la crisis. De esta manera, vemos que del 36% que representaban los derechos de propiedad en sociedades en 2002 se ha pasado al 29% actual. Asimismo, las cuentas bancarias donde existía un 42% del total de activos financieros superan ahora el 48%.
Por último, no podemos olvidar la inversión en la Bolsa. Allí, los números muestran un estancamiento, a pesar de tener movimientos de corto plazo y poco duraderos, los españoles no acaban de entrar en el mercado. Por ejemplo, en el año 2002, el importe en acciones cotizadas representaba un 7,27% del total de activos financieros. Al cierre del tercer trimestre de 2010, era más de un punto inferior.
Así es como tenemos nuestro dinero, y así es como está el país… poco productivo en comparación con nuestros vecinos. Después nos preguntaremos por qué razones cobramos menos si trabajamos más.