Se están imponiendo cambios, que pretenden mostrar la seriedad con la que se está tomando esta crisis y por otro lado intentar no afrontar en el futuro situaciones adversas como las actuales.
En el día de ayer la Unión Europea se reunió en Bruselas para debatir lasituación de los bancos y la solidez de los mismos por estos tiempos, intentado así aliviar las preocupaciones de que su sistema financiero esconde cantidades significativas de préstamos riesgosos que ponen en peligro la economía de la región. Momento oportuno este para tomar medidas, sobretodo atendiendo a la leve recuperación de euro.
El presidente español había pedido que se sumen a la posición de España de divulgar estos datos, a fin de tranquilizar a los mercados.
De esta manera se ha decidido divulgar los test de resistencia que se realizan para evaluar cómo los bancos enfrentarían serios problemas económicos.
El acuerdo representa una apuesta a que los beneficios de una inyección de confianza en el sistema bancario de Europa superarán las preocupaciones de que la publicación de los resultados pueda perjudicar a las instituciones más débiles y exigir costosos rescates.
El Banco Santander ha resultado ser la entidad financiera europeamejor calificada por el Comité Europeo de Supervisores Bancarios, que ha analizado el estado de las cuentas de los mayores bancos de la Unión Europea.
Las pruebas de estrés a los principales bancos europeos están siendorealizadas por los supervisores nacionales a partir de una metodología común elaborada por el Comité Europeo de Supervisores Bancarios (CEBS, por sus siglas en inglés). Su objetivo es comprobar la salud del sistema financiero en su conjunto y su grado de resistencia a un agravamiento de la crisis.
Según el test, el Santander, con un escenario de crisis brutal en España, sería capaz de asumir las pérdidas asociadas a su cartera crediticia con sus ingresos ordinarios. El agujero previsto en este caso en su red en España y en su filial Banesto “no superaría el 80% del margen de explotación de 2009 en ninguno de los ejercicios de 2010, 2011 y 2012″, según indica en su informe anual. De esta manera le quedarían en torno a 1.000 millones para hacer frente a los gastos operativos y a los impuestos.
La primera ronda de pruebas de estrés se realizó el año pasado y su conclusión fue que incluso en el peor escenario económico los grandes bancos resistirían, porque está suficientemente capitalizados, aunque podrían llegar a perder hasta 400.000 millones de euros entre 2009 y 2010.
Los resultados individuales no se publicaron por la oposición de la mayoría de países, incluida España.
LEsto sucede luego de una tensa semana donde los rumores de que España buscaría un rescate internacional de sus bancos, estuvieron en boca de muchos.
LPor lo tanto, ayer, los líderes de la UE acordaron en forma unánime que cada país miembro publicaría los resultados de las pruebas de resistencia nacionales realizadas a todos sus bancos tan pronto estuvieran listas Todos los resultados deberían ser divulgados a finales del próximo mes.
La renuencia a la publicación de los resultados había sido fuerte, en particular de Alemania, la mayor economía de la región pero la quepodría tener varios bancos en delicado estado de salud. Incluso durante la cumbre, según una fuente cercana, la canciller Angela Merkel era reacia a alcanzar un acuerdo y se mostró partidaria de realizar una divulgación coordinada de información de parte de los gobiernos.
El temor a una crisis bancaria como la sucedida en Estados Unidos en 2008, surge porque la exposición de los grandes bancos europeos a la deuda pública y privada en países como Grecia, Portugal y España sigue siendo turbia y las autoridades europeas han combatido durante meses los temores de que la crisis de deuda soberana de esos países pueda infectar el sistema bancario y causar un amplio daño.
La publicación de los resultados de las pruebas de resistencia realizadas en Estados Unidos el año pasado fue un momento clave en la crisis financiera, al ayudar a disipar las dudas del mercado sobre la salud de los bancos del país. Las pruebas contribuyeron a que 10 grandes instituciones recaudaran miles de millones de dólares para cerrar las brechas de capital identificadas por los reguladores.
El principal obstáculo que tuvo que ser superado para alcanzar el acuerdo fue la situación de los bancos regionales alemanes, o landesbanken, que son uno de los motivos de preocupación de los inversionistas junto a los bancos regionales españoles, o cajas.
Aunque las pruebas de resistencia pueden apuntalar la confianza del mercado, también acarrean riesgos, y el mayor es qué hacer con los bancos que no pasan la prueba. La mayoría de los países europeos han adoptado una filosofía de prudencia fiscal para aliviar las preocupaciones sobre sus déficits fiscales y niveles de deuda pública. Los rescates bancarios pondrían en riesgo tales esfuerzos