La agencia de rating Standard & Poors ha puesto en perspectiva negativa la nota de las entidades financieras que considera más débiles: Popular, Bankia y su matriz BFA, e Ibercaja ( que está en proceso de fusión con Liberbank y CajaTres). Elena Iparraguirre, portavoz de la agencia explica esta decisión en base a que la agencia desconfía del proceso de restructuración al que se verán obligadas las entidades que reciban dinero: ajustes, cambios de directiva, etc. Destaca la representante de S&P, que la agencia todavía no tiene suficiente información, pero que han decidido poner en vigilancia negativa a las entidades cuyos rating actuales ya estaban registrando una posible ayuda pública.
La firma recuerda que las entidades financieras que requieran parte de los 100.000 millones de euros puestos a su disposición por Bruselas tendrán que presentar planes de reestructuración que aseguren su viabilidad a largo plazo sin la ayuda estatal.
Esos planes deberán incluir, entre otras, iniciativas para reducir su negocio, lo que «podría tener implicaciones negativas en sus franquicias y en la estabilidad del negocio», señala.
Además, recuerda que los accionistas de esas entidades financieras y los inversores en deuda sufrirán pérdidas probablemente.
Actualmente, Standard & Poor»s tiene otorgada una calificación de BB+ a la deuda a largo plazo del Popular y Bankia, lo que ya se considera como bono basura, mientras que en el caso de BFA ese «rating» es aún menor (B+).
Sin embargo, Ibercaja se mantiene todavía un escalón por encima del bono basura al tener una calificación de BBB- en su deuda a largo plazo.
Puedes escuchar la explicación de la directora de Standard & Poor’s Elena Ipa