El final del paro no llegará hasta 2022

Que la crisis está haciendo estragos en el paro es por todos conocido, pero que no recuperaremos  el empleo perdido hasta dentro de 10 años, hace que cada vez más  veamos más ardua la salida de la crisis. Si a esto sumamos que tres de cada cuatro empresas españolas han llevado acabo planes de ajuste laboral, no es de extrañar  que perder el puesto de trabajo se haya convertido en una de las mayores preocupaciones de los españoles.

Desde que la ley de la reforma laboral fuera aprobada el pasado mes de febrero, la mayoría de las empresas han adoptados distintos planes de empleo, que van desde reducción de salarios o tiempo de trabajo, hasta drásticas disminuciones de  plantilla y despidos. De hecho, los expertos han pronosticado que se tardarán 10 años en recuperar los puestos de trabajo destruidos, así como en recuperar las condiciones laborales anteriores a la crisis.

El Primer Observatorio de Seguimiento de la Reforma Laboral, creado para monitorizar la aplicación práctica de la reforma, ha publicado un informe, elaborado por la Fundación Sagardoy, el Club de Excelencia en Sostenibilidad y la empresa de trabajo temporal Adecco, a partir de una encuesta realizada a 300 entidades, en el que se afirma que sólo un 27% de las empresas no han adoptado ningún tipo de medidas laborales.

Entre las medidas que más han puesto en práctica las empresas desde la aprobación de la reforma, destacan las relacionadas con la movilidad funcional, la reorganización del tiempo de trabajo y las reducciones salariales.  Sin embargo, y aunque en menor medida, también han sido muchas las empresas que han optado por el despido o no descartan hacerlo en futuro próximo.

Pero el informe no solo recoge valoraciones negativas,  ya que según el observatorio, y aunque todavía es pronto para sacar conclusiones sobre los efectos de la última reforma, lo cierto es que se han incrementado las contrataciones a tiempo parcial. Aunque dicho aumento sólo es relevante en aquellas empresas que cuentan con menos de 50 empleados.

El informe también destaca que se ha producido una reducción en los costes del despido, ya que la mitad de las empresas han abonado indeminizaciones de entre 20 y 22 días por año trabajado, mientras que sólo un 25% han tenido que pagar más de los 45 días, que era el máximo exigido por la anterior ley.

A pesar de ello, los autores del informe auguran una lenta recuperación del empleo, ya que hasta que no se produzcan tasas de crecimiento del PIB cercanas al  3%, no podrán crearse nuevos puestos de trabajo.