Muchas vueltas, algunas revueltas, y bastantes dudas. Así se puede definir rápidamente el proceso de la venta del paquete de activos inmobiliarios por parte de Sareb al fondo H.I.G Capital, en lo que se ha venido a llamar Operación Bull, que, sinceramente, a pesar de sentarse ya como cerrada, da la sensación de restarle algún capítulo más por descubrir.
Como todo, en esta operación, en la que muchos creen recordar fantasmas del pasado a manos del banco malo, ahí opiniones encontradas, las opiniones más optimistas son las que vienen a decir que la operación muestra un grado de interés tal vez no esperado por parte de los inversores internacionales en los activos inmobiliarios de nuestro país, los menos optimistas dudan de la operación, y fundamentalmente en duda el del nivel de descuentos que sería entendido que aplicar a los que ya se habían aplicado en el propio traspaso al banco malo dentro de esa adjudicación de cerca de 1000 viviendas y 750 trasteros y garajes.
Repasando la prensa, y buscando el precio de adjudicación de los activos en ella, lo cierto es que no encontramos de momento nadie que aporte cifras, es más, si encontramos cuestiones muy diferentes dependiendo de los análisis, que van desde las que afirman que la operación se ha realizado por un valor superior al de traspaso y los que, como indicamos anteriormente, se posicionan en el punto contrario.
Sea como sea, parece que, como decíamos a falta de que surja algún dato relevante que aún no se conoce, esta operación en la que se traspasaba una cartera de inmuebles a un fondo de activos bancarios en el que el banco malo posee una participación de 49% mientras que H.I.G el 51% restante, se ha realizado. Esta fórmula, que como decíamos despierta algunos fantasmas del pasado, de hecho supondría que los activos quedan inmovilizados en el fab, que no posee personalidad jurídica y tributa al 1% en el impuesto de sociedades, a la espera de su futura venta y obtención de plusvalías correspondientes.
A pesar de que ha trascendido que la cartera como indicamos anteriormente cuenta con algo menos de 1000 viviendas y 750 garajes y trasteros, ninguno de los dos organismos participantes en la operación ha aportado hasta ahora el tipo de viviendas que integran la cartera.