Las instituciones españolas están tiritando. Bancos, cajas y aseguradoras, los principales clientes del capital riesgo, están más pendientes de sanear sus cuentas que de realizar nuevas inversores. Y los family office, los otros habituales abastecedores de fondos al sector, están también digiriendo las pérdidas acumuladas durante los tres años de crisis.
El resultado es que en 2010 –sin contar los 300 millones de dinero público aportado por el Instituto de Crédito Oficial a su grupo de private equity Axis que se enmarca dentro del Fondo de Economía Sostenible- no se ha cerrado un solo nuevo fondo de capital riesgo con aportaciones del capital privado.
Lo más cercano es la ampliación de capital de 40 millones realizada por Gala Capital para apoyar a sus empresas participadas, como Coronel Tapioca, y realizar nuevas inversiones. La petición de liquidez a algunos de sus accionistas de referencia como Alicia Koplowitz o la familia Del Pino es, precisamente, la mejor demostración de lo difícil que es levantar un nuevo fondo.
No obstante, tres clásicos del capital riesgo español están en estos momentos solicitando dinero a los inversores para poner en pie sus nuevos vehículos de inversión. Se trata de Ibersuizas, Diana Capital y Nazca Capital. Ésta última es la que más ha avanzado. Ha conseguido ya 185 millones.
Nazca, apoyada por el gigante holandés del capital riesgo, Alpinvest, que se ha convertido en el principal inversor de sus fondos, ha obtenido todas las aportaciones de inversores internacionales. Pero el fondo –que ya realizó un primer cierre provisional de 116 millones a finales del año pasado- aún no está totalmente cerrado. Todavía espera conseguir otros 15 millones en los próximos meses.
Por su parte, Ibersuizas trabaja para conseguir alrededor de 300 millones en su nuevo fondo. La firma participada entre otros por la familia García Baquero y Banco Pastor apunta alto, ya que si cumple sus objetivos habrá levantado el mayor vehículo desde que empezó la crisis.
Diana Capital está en el mismo proceso. Quiere 175 millones para su segundo fondo. En el primero, participaron inversores como Caja Madrid, El Corte Inglés o Prosegur.
Cerrojazo creciente
Ya 2009 fue un año duro para la captación de fondos. Pero, a la espera de lo que pueda ocurrir en el último tercio de este ejercicio, el bajón es evidente. El año pasado, Arcano cerró su segundo fondo en 150 millones de euros, MCH su tercer vehículo de 250 millones –por debajo de las previsiones iniciales de 300- y Altamar uno más de 145 millones para invertir en el mercado secundario de capital riesgo.
En otro rango más bajo, Dinamia captó 40 millones a través de una ampliación de capital y Suanfarma Biotech otros 9 para invertir en empresas biotecnológicas.
De los 1.110 millones atraídos en el primer semestre de 2010, aproximadamente la mitad proviene de fondos asignados por entidades Paneuropeas para sus inversiones en España. Entre los fondos nacionales destaca, fundamentalmente, la ampliación del FOND-ICO, gestionado por Axis, por importe de 300 millones de euros, que se enmarca dentro del Fondo de Economía Sostenible aprobado por el Gobierno.
Además de otras aportaciones de entidades de capital riesgo públicas, pueden mencionarse las ampliaciones de los últimos fondos levantados por las gestoras privadas Nauta Capital y Nazca Capital.
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