Año nuevo, vida nueva… o no tanto. Llegadas estas fechas muchos son los cambios que queremos hacer para mejorar en el año que empieza. Dentro de las cosas que podemos hacer para mejorar nuestra vida en 2016 está el hecho de pensar en 10 propósitos financieros para el nuevo año. No es tan difícil y seguro que si apuestas por 10 al final del año habrás cumplido cinco, pero aún así tu situación económica será mejor.
- Aprende las más elementales cuestiones financieras. Saber distinguir entre intereses, inflación, diversificaciones, perfiles de riesgo y comisiones nos puede ayudar a ahorrar dinero o ganarlo.
- Haz un presupuesto y planifica los pagos. Es elemental, pero no mucha gente lo hace. Calcula lo que vas a ganar, lo que vas a gastar y cuándo vas a tener que hacer efectivos esos pagos. Eso evitará que entres en deudas.
- Practica el preahorro. Apartar dinero para jubilarte o para tener un fondo de emergencia por si las cosas se tuercen es inteligente. Se habla de preahorro porque se hace a principio de mes y no al final, es decir, cuando acabamos de cobrar y no con lo que nos sobra del mes.
- Cuidado con los pequeños gastos. El café diario, la revista, el tabaco, comprar marcas originales cuando las blancas son iguales son de esas cuestiones que hacen que nuestro dinero se nos escape sin darnos cuenta. Evita esos gastos en la medida de lo posible. Gastar con la cabeza es un deber. Seguro que has oído eso de que las personas ricas lo son porque no gastan. Quizás sea exagerado, pero no deja de tener cierto sentido.
- Busca ingresos adicionales. Nunca es fácil encontrar un trabajo y menos en estos tiempos y que sea complementario al que tenemos, pero se puede intentar. Además, podemos vender en el mercado de segunda mano aquello que ya no utilizamos.
- Haz trabajar a tu dinero. En la cuenta está bien el dinero, pero no produce, no trabaja. Estudia la posibilidad de comprar bonos, planes de pensiones o divisas extranjeras para conseguir más rendimiento, más intereses por nuestro dinero.
- Analiza tu perfil de riesgo. Con la ayuda de un experto debería analizar cuál es un tu perfil de riesgo para ver si tu cartera está adaptada a lo que tú quieres conseguir y a lo que puedes asumir.
- Guarda y revisa tus facturas. Tener un control de los gastos de casa y comprobarlos te puede ayudar a detectar errores o poder negociar en un futuro con las empresas suministradoras de servicios.
- Asegura tu patrimonio y lo que más te importa. Nadie está a salvo de inconvenientes inesperados y por ello es mejor estar preparado. Puede que al principio te parezca un derroche, pero si alguna vez ocurre algo inesperado agradecerás haber hecho ese seguro.
- Presta atención a la responsabilidad medioambiental de las empresas en las que inviertes o que consumes. En 2015 ha salido a la luz empresas que hacían trampa en este sentido. Castigar a las empresas que no sean medioambientalmente responsables es una cuestión elogiable, aunque también personal
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