En estos tiempos en los que existe bastante incertidumbre económica muchas personas recurren a fórmulas de préstamos incipientes como las hipotecas inversas. Sí, has leído bien y, si quieres, calcula tu hipoteca inversa por ti mismo y entenderás que es una operación totalmente segura y cómoda si necesitas el dinero.
Porque, según anuncian muchos economistas, parece que se acerca también una nueva crisis y, es posible, que con más fuerza que la pasada y a un nivel muchísimo más global. Igualmente, las convulsiones políticas que se están viviendo en varios países alrededor del mundo hace que todas las incertidumbres se potencien aún más.
El mercado inmobiliario, por su parte, va a experimentar cambios en los próximos meses siguiendo una tendencia que ya se viene vislumbrando de un tiempo a esta parte. De hecho, según los propios datos del Instituto Nacional de Estadística, entre enero y agosto de este año se han producido 282.565 compraventas de viviendas usadas y esto, aunque parezca mucho, significa que ha bajado un 3,5 % respecto al mismo periodo del año pesado. Esta cifra también es reveladora porque es la primera caída que experimentan operaciones desde hace cinco años.
Así que, en este contexto todo se vuelve más complejo, tanto para quienes quieren vender que, según la experiencia de algunas empresas inmobiliarias, los propietarios acaban bajado de un 3 % a un 12%, como para quienes están buscando, que acaban subiendo sobre un presupuesto que ya era alto.
Las hipotecas inversas potencian la calidad de vida
Estos vaivenes hacen que muchas personas cambien su percepción de la vivienda como una inversión y prefieran disponer del dinero – o de parte del dinero – para hacer otras cosas.
Las hipotecas inversas permiten esto. Son capaces de arrojar un poco de luz a todo esta maraña de oferta y demanda que resulta demasiado desequilibrada para unos y para otros y, sobre todo, a los más mayores, que ven que , tras su jubilación tampoco les queda mucho margen para hacer tantas cosas como quisieran.
Lo primero es entender en qué consiste y cómo funciona una hipoteca inversa. Es un producto financiero a través del cual se tiene parte del valor del inmueble utilizando a éste como garantía, sin perder la propiedad y continuando haciendo uso del mismo.
Así, los usuarios del inmueble pueden ir recibiendo cantidades mes a mes o en un importe único, como elijan, sin necesidad de tener que devolverlo. Aun así, la deuda nunca superará el importe total del inmueble.
Cuando llegue el fallecimiento, los herederos pueden optar por pagar la deuda o que ésta se pague con lo que quede de valor de la vivienda, siendo esta segunda posibilidad quizá la más práctica.
Esto, aunque parezca complicado, resuelve en gran medida el gran problema del bajo nivel adquisitivo cuando se ha producido la jubilación. Actualmente, la esperanza de vida no para de crecer y con ella, por fortuna, también la calidad de vida.
Hasta hace unas décadas, la jubilación casi significaba el fin de la vida. Ahora se viven 25 o 30 años más y de una forma más activa, viajando, visitando y conociendo, ¿por qué no disponer de un dinero para poder hacerlo?