Es cada vez más probable que España sufrirá tarde o temprano (y más allá de la ayuda específica para el sector financiero) un rescate en toda regla por parte de sus socios europeos.
Todo indica que lo que se está discutiendo ahora mismo son las propias condiciones de este futuro rescate.
Para el inversor en renta variable española lo que le interesará seguro es saber cómo podría reaccionar la bolsa española a esta noticia. Evidentemente siempre es difícil, por no decir imposible, adivinar cómo pueden comportarse los mercados a corto plazo. Pero tenemos, en el pasado reciente, a tres ejemplos sobre los que guiarnos.
Tuvimos en abril del 2010 el rescate a Grecia (por lo menos, el primero de ellos), luego en diciembre de ese mismo año el rescate a Irlanda y, finalmente, en abril del año pasado el rescate a Portugal.
Lo curioso es que estos tres rescates han tenido un impacto muy distinto cada uno en las bolsas de sus países respectivos. En el lado negativo tenemos que situar a Grecia. Desde que pidió el primer rescate el comportamiento de la bolsa griega ha sido mucho más negativo que el de la bolsa de la Zona Euro en su conjunto.
Pero también tenemos el caso contrario, el de Irlanda, en el que la bolsa ha tenido un comportamiento mucho mejor que la del índice Eurostoxx 50.
Y, por último, tenemos a Portugal, en el que ha habido periodos (sobre todo justo después del anuncio del rescate) en el que la bolsa se ha comportado mejor que el Eurostoxx periodos (especialmente desde principio de año) en los que el mercado se ha comportado peor que este índice de referencia.
En conclusión, tenemos tres casos distintos… pero tres resultados muy dispares como para sacar una conclusión clara sobre cómo se comportará la bolsa tras el más que posible rescate a la economía español.
Fernando Luque – Morningstar