La banca europea, que aún se encuentra peleando contra el efecto de la pandemia de coronavirus, tiene que hacer frente a otras vías de crisis. Las recientes investigaciones sobre posibles casos de transacciones sospechosas, movieron las cotizaciones en bolsa de algunas de las principales entidades bancarias del continente.
No está resultando ser un buen momento para las entidades bancarias pertenecientes a la Unión Europea, y no solamente por la crisis económica de la pandemia. Se ha revelado recientemente una investigación que pone en el punto de mira a muchos bancos europeos, y que está provocando que muchos de ellos sufran pérdidas superiores al 8%, llegando incluso a desplomarse.
El impacto inmediato, caída de valor
De esta manera, encontramos entidades bancarias severamente afectadas como ING, que ha sufrido una importante caída del 9%. A esta le siguen los recortes de Deutsche Bank, que ya alcanzan un 8%, al mismo tiempo que las acciones pertenecientes a Société Générale y BNP Paribas sufren retrocesos del 6,5% y 6%, respectivamente.
Esta reveladora investigación se ha publicado por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación, que si recordamos, fue el mismo organismo que destapó Los papeles de Panamá, como también el conocido caso de corrupción en la petrolera estatal angoleña o la Represión del Gobierno chino contra la minoría musulmana uigur.
El organismo descubrió que numerosos bancos de renombre en el continente europeo procesaron transacciones por valor de dos billones de dólares entre los años 1999 y 2017, aun a pesar de que se encontraban bajo la sospecha de cometer delitos financieros entre los que caben destacar el blanqueo de capitales, corrupción, fraude, crimen organizado e incluso financiación del terrorismo.
Todos los documentos que el organismo ha descubierto se han realizado por parte de las propias entidades sospechosas de cometer los delitos, y se pusieron en manos de la Red de Control de Delitos Financieros, un organismo del Gobierno cuyo principal objetivo es hacer frente a delitos entre los que se encuentran el blanqueo de capitales y, por supuesto, la financiación del terrorismo.
El Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación descubrió también que, en su momento, Deutsche Bank contó a las autoridades que había realizado pagos sospechosos por valor de 1,3 billones de dólares, lo que equivale a 1.103 millones de euros. Justamente en ese mismo periodo de tiempo, otra entidad, en este caso JP Morgan, declaró haber hecho transacciones sospechosas por un total de 514.000 millones de dólares, que vienen a ser 436.281 millones de euros.
A raíz de estas transacciones, se descubrieron a otras tantas entidades que habían realizado operaciones similares, como Standard Chartered Bank que procesó 166.000 millones de dólares. O también Bank of New York Mellon, con 64.000 millones de dólares, así como Barclays con 21.700 millones de dólares, Societé Generale con 8.500 millones de dólares, HSCB con 4.500 millones de dólares, y finalmente Commerzbank, que procesó un total de 1.700 millones de dólares.