Si algo hemos aprendido todos de esta crisis es que los bancos no parecen ser siempre nuestros amigos. Entre los escándalos de las participaciones preferentes, las hipotecas multidivisa y los techos de las hipotecas, muchas personas se han llevado las manos a la cabeza y se han replanteado si de verdad estaban confiando en las personas correctas.
Quizás por eso, los bancos ahora han pasado a ser la octava preocupación de los Españoles según el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
Y no me quiero ni imaginar que ocurrirá ahora, que ya se ha anunciado que Bruselas impondrá una quita en las preferentes de Bankia. Esta acción, obvia desde el punto de vista de Bankia (Si no tienen suficiente dinero para pagar… ¿Qué pueden hacer?), afecta mucho a los inversores particulares (bonita palabra para definirnos a tí, a mi, a nuestros abuelas y al resto de la humanidad), que tienen 3.100 millones invertidos y a los inversores institucionales… un poquito (ellos tienen solo 100 millones de euros en preferentes- Cuando los profesionales huyen de un producto y luego eso se vende a la masa, ojito.).
Entonces, Bankia no tiene dinero para pagar y por tanto tiene que hacer una Quita, ¡Ok! Me parece una jugarreta para los que hayan invertido, pero se entiende… siempre que invirtiésemos en esos productos conociendo los riesgos. Pero, ¿Debe pagar el Español de a pie los desmanes de unos «Asesores Bancarios» timadores?
Porque no nos equivoquemos. Lo que ha ocurrido aquí, aunque no podamos señalar individualmente a nadie, sí nos dice que el sistema de venta de productos de los Bancos Españoles está roto.
Y ahora que los bancos no tienen dinero con que pagar… quien lo pagará será el pequeño inversor. Nunca antes ha sido tan importante tener educación financiera o utilizar asesoramiento independiente. Espero que estos varapalos a la confianza de los bancos nos ayuden a emprender este camino.
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