Según han comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria se integrarán en una ‘fusión fría’ con la finalidad de reforzar la solvencia y patrimonio de cada una.
Por lo tanto, estas cajas han sellado un protocolo de intenciones para integrarse en el denominado Sistema Institucional de Protección (SIP) que se articula como un banco con sede en Madrid, encargado de las políticas de riesgos, tesorería, calificación crediticia, control interno y requerimientos regulatorios de todas ellas.
El SIP estará participado por CAM en un 40%, al igual que porCajastur (40%), mientras que Caja Extremadura y Caja Cantabriacontarán con una participación del 11% y del 9%, respectivamente.
A pesar de esta nueva operatoria, cada caja de ahorros mantiene su:
- personalidad jurídica
- implantación regional de negocio minorista
- órganos de gobierno
- obra social independiente
- red comercial en cada territorio con la marca actual
- insignias
De concretarse, finalmente esta fusión ‘fría o virtual’ dará lugar altercer grupo financiero de cajas de España y el quinto grupo del sector financiero español.
El volumen de activos seperará los 135.000 millones de euros, unvolumen de negocio de unos 177.000 millones de euros, y un ratio de solvencia del 12,1%.
Este grupo contará con una red comercial de 2.300 oficinas y una plantilla conjunta que ronda los 14.000 empleados, mientras que su cartera de participadas tiene un valor de 4.000 millones de euros en el balance agregado.
El consejo de administración tendrá doce miembros:
- Presidente: Modesto Crespo (actual presidente de CAM)
- Consejero delegado: Manuel Menéndez (presidente de Cajastur)
- Vicepresidente primero Víctor Bravo (presidente de Caja Extremadura)
- Vicepresidente segundo: Enrique Ambrosio (presidente de Caja Cantabria)
Las entidades integrantes del grupo asumen un compromiso recíproco de solvencia de la totalidad de los recursos propios de cada entidad participante y de liquidez, mediante la creación de un sistema de tesorería global.