Los ficheros de morosidad, comúnmente conocidos como listas de morosos, son registros que contienen información sobre impagos de personas físicas o jurídicas. En España, los más conocidos son ASNEF, RAI y CIRBE. Estar en uno de estos ficheros puede complicar la obtención de financiamiento o la contratación de ciertos servicios. Por lo tanto, es comprensible que las personas quieran salir de ellos lo antes posible. Pero, ¿es realmente sencillo hacerlo? A continuación, desglosamos el proceso y lo que se debe tener en cuenta.
¿Cómo se llega a estar en un fichero de morosidad?
Antes de entrar en el cómo salir, es vital comprender cómo se llega a estar en estas listas. Básicamente, cuando una entidad (ya sea un banco, una compañía telefónica, una empresa de servicios, etc.) considera que una deuda no ha sido satisfecha, puede optar por incluir al deudor en uno de estos ficheros. Sin embargo, deben cumplirse ciertos requisitos, como haber requerido el pago al menos en dos ocasiones y haber informado al deudor de la posibilidad de incluirlo en el fichero.
Antes de todo, verifica que la deuda por la cual te han incluido es real y correcta. Puede haber errores o malentendidos. La forma más directa de salir del fichero es pagando lo que se debe. Una vez hecho el pago, la entidad que te inscribió debe comunicar tu baja en un plazo máximo de un mes.
Las deudas no pueden permanecer eternamente en los ficheros de morosidad. Si han pasado seis años desde la fecha de vencimiento de la deuda sin que se haya renovado, puedes solicitar la baja. Si consideras que tus derechos han sido vulnerados o que tu inclusión en el fichero fue injusta, puedes recurrir a la Agencia Española de Protección de[…]Leer noticia completa en la fuente original