La mayoría de las personas saben cuándo tienen dificultades financieras. Sobre todo, cuando pagas todo con efectivo o débito. Cuando se acaba el dinero, no tiene más remedio que dejar de gastar, incluso si todavía hay cuentas por pagar.
Sin embargo, la deuda de la tarjeta de crédito es diferente. Puede distorsionar su impresión de su situación financiera porque no está pagando las cosas directamente. Y cuando considera el hecho de que lo más probable es que solo necesite hacer un pago mensual más pequeño que la cantidad que gastó, es fácil ver cómo comprar cosas a crédito puede salirse de control rápidamente.
El simple hecho de tener deudas no es un problema en sí mismo. El problema es cuando tienes más deudas de las que puedes manejar. Esa distinción puede ser engañosa a veces.
Cómo empezar a salir de una deuda de tarjeta de crédito
Antes de que pueda actuar, necesita conocer el panorama general de su situación financiera. Siéntese y cree una lista u hoja de cálculo de cada deuda que tenga, cuánto debe cada mes y su saldo total. Incluya sus pagos mensuales como alquiler/hipoteca, servicios públicos y alimentos para que sepa qué necesita salir cada mes. Luego cree un presupuesto para calcular cuánto puede permitirse pagar en cada cuenta. Encuentre maneras de reducir otros gastos si es necesario.
Sus acreedores no quieren que deje de pagarles, por lo que a menudo les conviene ayudarlo si tiene dificultades. Explique su situación y vea si están dispuestos a trabajar con usted para reducir su tasa de interés, ponerse al día con los montos vencidos y negociar un monto de liquidación. Es posible que tengan planes a corto y largo plazo disponibles para ayudarlo a manejar cualquier dificultad[…]Leer noticia completa en la fuente original