Una Sociedad de Inversión de Capital Variable (SICAV) es una sociedad anónima constituida en España, cuyo domicilio y administración se establecen en el país. Su objetivo principal es servir como instrumento financiero, y se dedica exclusivamente a la adquisición y gestión de valores mobiliarios y otros activos financieros.
La SICAV es una de las modalidades de Instituciones de Inversión Colectiva (IIC), las cuales se crean con el fin de invertir en bienes, derechos, valores u otros instrumentos financieros, estableciendo los rendimientos en función de los resultados obtenidos. Debido a que las SICAV son una forma híbrida entre un Fondo y una Sociedad, disfrutan de las mismas ventajas fiscales que los Fondos de Inversión al estar sujetas al mismo régimen.
En qué consiste la SICAV
Según algunos autores, los orígenes de las SICAV se remontan a la Edad Media, ya que sostienen que en aquel entonces había grupos de inversores que se unían para gestionar sus patrimonios de manera más eficiente y especializada. En España, las SICAV y los Fondos de Inversión fueron regulados por primera vez en 1964. En 1983, durante la presidencia de Felipe González, se crearon las SICAV para evitar la fuga de capitales y durante la presidencia de José María Aznar se confirmó su creación.
Desde sus inicios, las SICAV han enfrentado el problema de la doble imposición entre el impuesto de sociedades y el IRPF. Sin embargo, en 1990 se resolvió este problema al establecer que las SICAV, al igual que los Fondos de Inversión, tributan al 1% en el impuesto de sociedades, mientras que los accionistas particulares declararon sus plusvalías en su declaración del IRPF o de la sociedad de la que formen parte.
Participar en una SICAV es sencillo ya que la mayoría[…]Leer noticia completa en la fuente original