La celebración del BarCampBank de Madrid organizado por FinancialRed tuvimos la oportunidad de juntar a muchos emprendedores y actores del mundo financiero en Internet y los nuevos medios de comnunicación. Para este acto contamos con la colaboración especial de Networking Activo, que nos apoyó a ordenar las diferentes partes del evento y a moderar algunos de los foros de debate que surgieron durante el mismo. Además, sus cámaras fueron el mejor testigo del evento y pudieron recoger las opiniones de buena parte de los asistentes.
Esta primera colaboración, que esperemos sea el comienzo de una relación duradera, también nos ha pertido contar con un artículo de Emilio Marquez, fundador de Networking Activo titulado: La banca y la reputación online:
La reputación online es un término que se refiere al prestigio del que gozamos en la red de Internet. Todo lo que se publica en Internet queda registrado para siempre y la imagen propia y de nuestra empresa en este medio ha de ser cuidada al máximo, porque nuestra reputación está sujeta a lo que hacemos y a lo que los demás piensan y dicen de nosotros. De ahí la necesidad de no perder de vista este aspecto si pretendemos gozar de una buena consideración. Con el incremento de herramientas que nos permiten poseer una identidad digital al alcance de cualquiera, y la facilidad de publicar información en abierto, la necesidad de conocer las consecuencias aumentan.
Internet es un canal de comunicación e información de gran potencia por su inmediatez. Toda la información vertida en ella permanece y puede ser consultada en cualquier momento y lugar. En torno a las redes sociales han surgido debates, de gran vigencia en la actualidad. El uso masivo de éstas por parte de los jóvenes ha creado una alarma social en torno al mal uso que se pueda llegar a hacer de las mismas. El no ser conscientes de la relevancia que pueden alcanzar ciertos datos, puede traernos consecuencias negativas. Hemos de estar siempre seguros de que la información que compartimos en estas redes sociales sea absolutamente inocua para nuestra buena imagen.
Las redes sociales, así como el blog personal, vinculado a nuestro nombre, pueden suponer un «arma de seducción» que puede acabar volviéndose en nuestra contra. Demostrar cierta transparencia, posicionarse en posturas que no resultan excesivamente radicales, facilitar sólo los datos que sean necesarios, procurando restringir aquellos que sean meramente personales, darán una imagen más seria y profesional de nosotros mismos. Cuando adoptemos estos recursos como complemento a nuestros perfiles profesionales, con más motivo además, cuidaremos los comentarios e información que de nosotros se viertan. El prestigio no sólo viene dado de aquello que hagamos o seamos, sino también de lo que los demás puedan decir de nosotros. Pero esto tiende a escaparse de nuestro control cuando hablamos de un medio abierto a la participación, donde la libertad de expresión es un mandamiento.
Estos consejos sirven para todos los ámbitos. No sólo a la hora de buscar un empleo, o lograr un ascenso, sino también para algo tan común como pedir un crédito en el banco. Dada la actual coyuntura económica, los bancos han decidido cubrirse las espaldas y prestar financiación sólo cuando «lo vean claro». Por supuesto los bancos buscan la solvencia del cliente, estudian los ingresos y los riesgos, para lo que cuentan con el CIRBE, Central de Información de Riesgo del Banco de España, que informa de otros créditos ya existentes. También bienes inmuebles o avales son requeridos como respaldo al pago de la deuda. Ser un buen pagador es una cualidad que valoran en gran medida los bancos. Cuando la banca te conoce personalmente, dispone de información de primera mano. Sin embargo cuando llegas como nuevo cliente, la red de Internet es una ventana abierta para ampliar información.
Conocer la reputación online de la que goza el cliente, puede hacernos descubrir cuestiones de importancia. Por ejemplo, si resultamos ser empresarios que llevan meses sin pagar a sus trabajadores, con deudas cuantiosas a proveedores, con escasa capacidad de continuidad en los negocios, nuestra credibilidad se verá debilitada. Las entidades, ante las dificultades de los últimos meses, se ven obligadas a indagar hasta asegurarse el cobro de la cifra concedida.
No obstante, no todo lo que dichas entidades encuentren indagando en la identidad digital de sus clientes ha que ser negativo. El hecho de tener un blog personal con seguidores y comentarios favorables, así como menciones positivas en redes sociales como linkedin, xing, etc. podría constituir un punto a favor del solicitante. En cualquier caso, lo que sí está claro es que puede ser una medida que lleve a las compañías a ser más honestas y a llevar una gestión más cuidadosa de la imagen propia en la red.
¿ Cuál sería tu opinión al respecto? ¿Crees que somos cuidadosos con nuestra propia imagen en la red? ¿Crees que están relacionados la crisis y este reciente interés de la banca en la reputación online?