En períodos como el actual, donde la crisis económica afecta a la economía doméstica de manera tan evidente, es perfectamente normal que intentemos abaratar todos los costes posibles sin renunciar a las cosas.
Esto se hace especialmente patente en un momento como el verano, en el que obviamente la gran mayoría de las familias españolas no se pueden permitir unas vacaciones como las de hace siete u ocho años, pero, tampoco, quieren renunciar al periodo vacacional.
Esta situación deriva en una comparación de precios cada vez más exhaustiva por parte del usuario, en una búsqueda del mejor precio, en un aumento de la oferta de alquiler vacacional, y, como es de esperar, en un enorme aumento del fraude en los alquileres en vacaciones.
Internet la jungla de la oferta
El gran problema del alquiler vacacional fraudulento es, a primera vista, lo difícil de su detección. Debemos tener en cuenta que, como veremos más adelante, la inmensa mayoría de los ganchos para fraudes en alquiler de vacaciones, cumple a primera vista con los requisitos habituales de ofertas no fraudulentas, es más, nos los podemos encontrar conviviendo en un mismo espacio online, lo que sin duda genera una enorme confusión en el usuario.
La realidad es que los diversos buscadores, comparadores y soportes de anuncios para alquilar un apartamento, villa o vivienda, en verano, multiplican la presencia de estos anuncios, y generar un caldo de cultivo que por un lado o diabetes muy atractivo para el usuario ya que tiene acceso a una gran oferta, pero que a la vez resulta ser un excelente camuflaje para los malos del asunto, para aquellos que desean hacer negocio fraudulento a costa de quienes buscan un buen precio para sus vacaciones.
¿Cómo sé si es un fraude?
No existe una receta mágica que nos pueda librar al 100% de caer en un engaño, debemos recordar que no sólo estamos hablando en este caso de fraude relacionados con el anuncio de alquileres vacacionales que luego no existe, sino también con el de las falsas ofertas en relación a cuestiones como la calidad de lo ofertado, su ubicación o condiciones.
Sin embargo si existen algunas precauciones que deben ser tenidas en cuenta.
Sin duda la primera de ellas tiene que ver con el principal gancho que se suele utilizar para tratar de confundir al usuario; el precio.
Si estamos realizando una comparativa de precios y encontramos, situadas en un mismo entorno, ofertas que difieren de manera más que notable en el precio, debemos por sistema desconfiar; no decimos que los chollos no existan, pero sí que son muy pocos, que raramente aparecen y menos en plena temporada veraniega.
Si aún así hemos sucumbido a los cantos de sirena de una oferta escandalosamente baja, lo siguiente que deberemos tratar de hacer para no caer en las fauces de un fraude, es tomar contacto personal con el ofertante. De manera habitual en estos fraudes el delincuente procura no utilizar ni referencias personales, ni números de teléfono, ni por supuesto cuentas bancarias a su nombre. Que nos ofrezcan todo esto, y que nosotros lo comprobemos, no es garantía total de seguridad, sin duda aumenta exponencialmente el porcentaje de seguridad en la operación.
Otras cuestiones interesantes pueden ser por ejemplo, buscar opiniones de usuarios que hayan ocupado anteriormente nuestros destinos solicitados, tomar contacto personalmente a través de teléfono con el propietario u ofertante, y comprobar que los datos sean reales…y por supuesto, no realizar ninguna fianza previa si no se tiene el total convencimiento de estar ante una oferta verdadera y en cualquier caso no hacerlo a través de métodos alternativos que no sean ingreso en cuenta correspondiente a los datos de quién nos oferta el alquiler.
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Deseo info de la franquicia grnvacaciones porque estoy interesada pero hay algo que no veo limpio. Mi móvil es 646738051