Existen dos campos de pensamiento principales cuando se trata de evaluar acciones: el análisis técnico y el análisis fundamental . Cada enfoque ofrece una perspectiva única sobre cómo seleccionar acciones para invertir, y comprender las diferencias y aplicaciones de cada uno puede ser crucial para el éxito de un inversor.
A medida que navegamos por 2024, la elección entre estos métodos se ha vuelto aún más relevante en un mercado que es simultáneamente volátil y lleno de oportunidades.
Fundamentos del análisis técnico
El análisis técnico se basa en la premisa de que los precios de las acciones se mueven en tendencias identificables y que el estudio de los patrones históricos de precios y volúmenes puede predecir la dirección futura de esos precios . Los técnicos, o chartistas, utilizan una variedad de gráficos y herramientas matemáticas, como medias móviles y osciladores, para identificar patrones y señales de compra o venta.
La creencia subyacente es que el mercado descuenta todo: todas las noticias, datos financieros y factores económicos ya están reflejados en el precio de las acciones.
Principios del análisis fundamental
Por otro lado, el análisis fundamental se enfoca en evaluar el valor intrínseco de una empresa para determinar si la acción está sobrevalorada, infravalorada o correctamente valorada. Los fundamentales examinan una amplia gama de factores, incluidos los financieros —como ingresos, beneficios y crecimiento— y los cualitativos —como la calidad de la gestión, el sector de la empresa y las condiciones del mercado. La idea es comprar acciones que se vendan por menos de su valor intrínseco con la expectativa de que, eventualmente, el mercado reconocerá este valor y el precio de la acción aumentará .
¿Cuál enfoque es el mejor?
La respuesta a esta pregunta depende en gran medida de tus objetivos de inversión, tu horizonte[…]Leer noticia completa en la fuente original