La pandemia por Covid-19 ha traído consigo graves problemas sanitarios y económicos para la gran mayoría de países de todo el mundo, incluyendo potencias mundiales que jamás hubiéramos pensado que se pudieran encontrar ante una situación semejante, como es el caso de China o Estados Unidos.
En base a los datos recopilados por la Autoridad Europea Bancaria, podemos ver cómo al terminar el pasado año 2019, el ratio de solvencia de las entidades bancarias españolas era de un 11,9%. Una cifra bastante buena para nuestro país, a pesar de encontrarse tres puntos por debajo de la media continental.
El país que presenta una mayor fortaleza económica de la Unión Europea en este contexto, es Holanda. Sus cifras se encuentran muy por encima de la media del resto de países pertenecientes a UE, y es que sitúan su umbral económico en un 16,5%. Por debajo nos encontramos a las entidades bancarias pertenecientes a Italia, que a pesar de encontrarse en un momento extremadamente delicado por la pandemia, consigue posicionarse en un 13,2%.
De esta manera los expertos afirman que, en general, la Unión Europea dispone de una mayor capacidad para solventar los problemas causados por la crisis económica del Covid-19, a diferencia de la resistencia que se mostró en crisis anteriores como la del 2008. Esto se debe a que, actualmente, se dispone de una mayor liquidez, así como una mayor calidad de activos.
Por otro lado, también se prevé que el 2020 finalice con gran cantidad de impagos propiciados por la pandemia, algo que sin duda va a afectar a la banca, y no precisamente para bien. Por el momento, la banca española se encuentra registrando un aumento significativo en cuanto a la solvencia, cerca de los 5 puntos en comparación con la recesión dada hace más de un decenio.
Esto se debe a la paulatina acumulación de fondos tras cada ejercicio. También podemos observar cómo el balance se ha saneado con la venta de créditos morosos, así como la venta de inmuebles adjudicados. No obstante, no todo son buenas noticias, ya que la banca todavía acumula activos deteriorados por valor de 79.152 millones de euros.
La morosidad y la banca española
Uno de los obstáculos más graves para la economía española desde siempre, y especialmente en momentos como en el que nos encontramos, es la morosidad. Los expertos prevén que el nivel de insolvencias se duplique, ya que millones de familias en España se encuentran con problemas económicos a causa de la pandemia por Covid-19, por lo que no podrán hacer frente a ciertos pagos. Es muy probable que ocurra una situación similar también con las empresas, especialmente aquellas que acaban de comenzar o que no son lo suficientemente grandes.
La clave para poner solución a estos problemas económicos, radica en los colchones de capital. Por su parte, el Banco Central Europeo se ha mostrado mucho más permisivo en cuanto a la manera de contabilizar los créditos morosos, y además va a dar luz verde al gasto de huchas de solvencia sin penalizar de ninguna manera a las entidades bancarias que lo hagan. Solamente de esta forma se va a conseguir solventar la crisis económica y ponerle remedio de la forma más rápida posible.