Dos economías europeas y periféricas vuelven a estar en el punto de mira de los inversores, aunque por suerte ninguna de ellas es España. Irlanda y Portugal han vuelto a hacer historia y no precisamente por haberse marcado un tanto a favor. Todo lo contrario: sus economías son más peligrosas que nunca. Al menos, eso es lo que percibe el mercado, que ayer disparó las primas de riesgo de ambos países hasta nuevos máximos desde la entrada en vigor del euro.
Al cierre de la sesión bursátil europea, el diferencial entre los bonos de ambos países y el bund alemán -la referencia en Europa- se dispararon por encima de los 400 puntos básicos. Concretamente, alcanzaron los 402 puntos básicos -en el caso portugués- y los 419 puntos básicos -en el irlandés-, arrastrados por la incertidumbre que siembra en los mercados la posibilidad de que ambos países tengan dificultades para financiar sus déficits públicos.
Como consecuencia, los seguros contra el riesgo de impago de estos dos países periféricos -los famosos Credit Default Swap o CDS- también marcaron nuevos máximos. Los seguros irlandeses -es decir, los que compran los inversores para cubrirse de un posible impago del estado irlandés- se dispararon hasta los 448,5 puntos básicos, frente a los 420,9 puntos básicos en los que cerró en la pasado viernes.
En el caso luso, el coste de asegurar el bono portugués a cinco años se situaba esta tarde en los 375,8 puntos básicos, por encima de los 365,3 unidades del anterior cierre, según datos de CMA Datavision recogidos por la agencia Europa Press.
España se salva del ‘efecto contagio’
Las dudas que genera en el mercado la posibilidad de que tanto Irlanda como Portugal no cumplan con sus ajustes presupuestarios y no puedan sanear sus economías parecen haber centrado toda la atención del mercado.
Apenas tres meses después de haber sufrido un ataque especulativo contra nuestros mercados, España parece alejarse del peligro: no se ha visto afectada por el riesgo de sus vecinos. De hecho, la prima de riesgo ofrecida a los inversores por nuestros bonos soberanos se mantuvo estable en torno a los 177 puntos básicos, la misma cifra en la que cerró el pasado viernes.
Mientras, los seguros de impago de la deuda nacional retrocedieron casi un punto: desde los 237,9 puntos básicos que marcaron el viernes hasta los 236,7 puntos básicos que registraron ayer. Sin embargo, España no es el único de los PIIGS -término que engloba a Portugal, Irlanda, Italia, Grecia y España- que ha visto reducidos sus niveles de riesgo. Grecia también.
Los CDS helenos registraron un fuerte descenso, al caer de los 888,5 puntos básicos hasta los 852,7 puntos básicos. Otra noticia positiva para el país gobernado por Georgios Papandreu, que ayer también conoció que Europa y el Fondo Monetario Internacional (FMI) conceden una prórroga a sus bancos antes de realizarles unas pruebas de solvencia.