¿Por qué no gustan nuestros ministros de economía?

La economía europea no va bien, pero a los que tampoco parece irles de maravilla es a los ministros de economía españoles.  Y esto debe ser correlativo, pues casualmente, el ministro peor valorado de toda Europa, es el nuestro, Luis De Guindos. A un año de su gobierno, ¿En qué ha fallado?, ¿Qué le diferencia de sus homólogos europeos?

Esta es la conclusión, a la que ha llegado el diario británico Financial Times, que sitúa entre los 19 ministros analizados, a Luis De Guindos en el último puesto. Hemos intentado ir más allá, y entender las razones de esta clasificación.

En primer lugar, se critica su falta de credibilidad y el poco tacto para comunicar sus políticas y las decisiones de su cartera a los españoles. Sobre todo, después de que anunciara de que en el caso de que España pidiera el rescate, no habría condiciones adicionales a cumplir, afirmaciones que fueron desmentidas desde Bruselas y el Banco Central Europeo.

A nivel europeo, también parecen haberse dado cuenta, y son muchos los que critican su incapacidad para trabajar en equipo dentro de la Unión Europea. Y es que si nosotros no tenemos claro lo del rescate, parece que los que van a tener que dar el dinero tampoco lo tienen demasiado.

Y como a todo político hay que tenerle en cuenta los objetivos y los logros durante su gobierno, el tercer gran elemento que ha influido en la decisión de Financial Times, lógicamente es la evolución de nuestra economía y competitividad.

De hecho, el FMI ya anunció que España seguiría en recesión durante 2013, a pesar de los duros recortes que se han acometido en los últimos años. Si a esto le sumamos, el desempleo y el malestar generalizado de los españoles, la operación constata ese último puesto.

Los anteriores ministros de Economía

Su antecesora en el cargo, Elena Salgado, tampoco salio bien situada en el ranking de Financial Times.  En concreto, quedo en el puesto número 13, a pesar de que la situación económica, tampoco mostró signos de recuperación y el déficit se hizo difícil de controlar. De hecho, pronosticó que durante su mandato, España cerraría sus cuentas públicas con  cerca del 6% del PIB, y posteriormente resultó que estaba dos puntos por encima.

Pero no es todo, una vez apartada de la política sigue despertando las criticas, pues una vez dejada la política, paso a formar parte del grupo de consejeros de una importante empresa energética, y todo a pesar de que la legislación actual impide a un ex-alto cargo trabajar para una empresa privada durante los dos años posteriores a abandonar el puesto.

Elena Salgado, sucedió en el cargo a Pedro Solbes, quién tampoco supo hacerlo mejor y por ello ocupo la posición 17 del citado ranking.  De hecho, negó la crisis hasta prácticamente el último momento y fue incapaz de parar lo que empezaba a producirse en nuestro país.  Pero en su vida actual, también parece coincidir con su sucesora, pues actualmente, forma parte del consejo de administración de la eléctrica Enel.

Saquen sus propias conclusiones, sobre por qué no gustan nuestros ministros de economía.  Gusto que parece transcender las fronteras nacionales e instalarse en opiniones internacionales, tan importantes para entre otras cosas, lograr la credibilidad que en estos momentos necesita España.